Gurpegui, muy emocionado, en su adiós.

«No sé si merezco tanto cariño»

Carlos Gurpegui se despide de la mejor forma posible del equipo en el que ha disfrutado de 14 años «maravillosos»

elcorreo.com

Sábado, 14 de mayo 2016, 20:01

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Gurpegui se ha visto superado por la emoción. El capitán del Athletic se ha despedido este sábado del equipo en el que ha pasado 14 años «maravillosos». Quería un acto sencillo aunque los sentimientos, a flor de piel, han regalado al de Andosilla unos ... minutos inolvidables.

Cuando el cuarto árbitro ha mostrado el número '18' La Catedral se ha puesto en pie. El jugador se abrazaba con todos sus compañeros sin poder aguantarse las lágrimas. De hecho, no han sido pocos los que no han podido evitar ponerse a llorar en las gradas.

Tras el partido, y ya con la quinta posición asegurada, Gurpegui ha recibido el homenaje que merecía. «Gracias por haberme hecho sentir especial», ha agradecido el capitán con un hilillo de voz. Justo antes, las pantallas de San Mamés habían proyectado un vídeo de toda su carrera. El central estaba acompañado en el campo por sus dos hijas y por Josu Urrutia.

«Siempre os llevaré en el corazón», ha prometido Gurpegui a su afición. El capitán se ha ido al vestuario emocionado a más no poder, pero con la convicción de que seguirá perteneciendo a la familia del Athletic.

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Tres irrintzis

Ya más calmado y después de haber vivido una tarde de lo más especial, Gurpegui ha vuelto a agradecer las muestras de cariño recibidas a través de un vídeo difundido por el Athletic Club. «Ha sido magnífico», ha reconocido. «Terminar jugando y poder sentirme partícipe de los éxitos colectivos es muy bonito», ha comentado el capitán, que ha tenido la despedida «soñada». «Me he sentido muy querido a lo largo de estos 18 años en el club -14 en el primer equipo- y solo me queda dar las gracias a toda la familia del Athletic», ha indicado el futbolista.

«Me buscaban mis compañeros con cada gol», ha remarcado con una sonrisa. «No sé si merezco tanto cariño», ha dicho con modestia sobre un acto en el que se ha sentido eufórico. «Hasta me he encontrado bien en la grada haciendo tres irrintzis».

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«Creo que he transmitido cosas buenas a mis compañeros y espero que se queden con lo bueno de mí», ha confesado que capitán. Este sábado ha sido «una de las pocas veces» que el jugador ha llorado en un campo. En el minuto 18, con la ovación de la grada, no ha podido aguantarse las lágrimas.

Gurpegui se marcha con la esperanza de «haber estado a la altura del escudo del Athletic». El de Andosilla cree que Aduriz, Iraizoz, Raúl García y Susaeta serán quienes marquen el camino a partir de ahora y quienes se echarán sobre los hombros el peso del equipo.

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