Morir matando

El objetivo de los cachorros de José Ángel 'Cuco' Ziganda, es tan claro como quimérico: recortar un punto por jornada hasta que acabe el curso a las posiciones de salvación, que, curiosamente, cierra el Huesca con 12 puntos más que el filial bilbaíno. «Una cosa es perder los partidos y otra cosa es tirar. No vamos a tirar absolutamente nada y no vamos a reglar absolutamente nada», ha adelantado el técnico navarro, consciente de que ganar de campo maño es una de las últimas oportunidades de engancharse a una permanencia que, si se impone al Huesca, se le acercaría a nueve o diez puntos.

De todos modos, Ziganda no está excesivamente preocupado por los resultados, ya que no son el principal objetivo de un conjunto al que sigue viendo «el mejor equipo sub-23» del fútbol nacional y en la línea de trabajo que le marca la entidad rojiblanca.

«Para el futuro del club no es importante la permanencia, para el futuro del club lo importante es tener grandes jugadores sub-23», tiene claro el exgoleador. Está especialmente satisfecho de que sus jóvenes jugadores tengan «un comportamiento ejemplar» a pesar de los varapalos recibidos una semana sí y otra también. El último de ellos, un 0-4 en San Mamés ante el Gimnàstic de Tarragona que aprovechó especialmente las deficiencias locales «en las áreas» donde le faltan contundencia -en la propia- y definición -en la rival-. Ha sido la goleada más abultada que han recibido en lo que va de temporada.

Ziganda pondrá mañana en juego un once con Villalibre de inicio, a pesar de que el internacional Sub-19 «tiene un problema en la espalda» que acusa en los partidos y los días después. «Pero no le queremos parar porque ya ha estado parado mucho tiempo», ha comentado sobre una de las perlas de Lezama.

Junto a Villalibre, se espera el regreso de Yeray tras sanción en una defensa con tres centrales, junto a Ramalho y Gil o Saborit, por delante de Remiro. De ahí hacia adelante, Etxeberria e Iriondo o Saborit en las bandas, Vesga con Unai López o Jon Iru en el doble pivote; y Aketxe dirigiendo una ofensiva con un segundo delantero, Santamaría o Guarrotxena, al lado de Villalibre.

De todos modos, ese 1-3-5-2 podría convertirse en un 1-4-4-2 que hace tiempo no utiliza o en el 1-3-3-3-1 que no le salió bien en la última jornada, «en función de los jugadores» que elija.

El Huesca, en la pelea por la permanencia

El Huesca, por su parte, afronta el partido con la idea de no fallar, ya que de lo contrario daría un paso atrás muy importante en sus aspiraciones para mantener la categoría.

Otro de los retos que tiene el equipo que dirige Juan Antonio Albacete 'Anquela' es no dejar escapar los puntos en el campo del Alcoraz, ya que está resultando esta temporada un problema que hasta la fecha no han podido solucionar de manera satisfactoria.

En principio no debería tener excesivos problemas el conjunto oscense para deshacerse del rival, un equipo filial que está descolgado en la tabla, en la que ocupa la última posición, aunque los jugadores y técnico del conjunto azulgrana no se quieren fiar de la situación. El entrenador tendrá que hacer cambios en el equipo para recuperar jugadores que estaban lesionados y para darle más consistencia defensiva y mayor efectividad en el ataque.

En la portería seguirá una semana más Whalley, al no estar recuperado Leo Franco, y en la defensa volverán al equipo titular el central Íñigo López y Cristian Fernández. En el centro del campo, Bambock también puede volver a ser titular; y en el ataque Arruabarrena seguramente seguirá en busca de hacer el primer gol.