El Athletic apuesta por Europa

"Me da igual si dicen que tiro Europa". Ernesto Valverde tenía claro que en Turín debía dosificar a sus puntales para pensar en el importante duelo del domingo frente al Rayo, y por eso su alineación ha tenido muchas caras nuevas en prácticamente todas sus líneas. Herrerín ha ocupado la portería, mientras la defensa ha sido la línea más reconocible, con De Marcos y Aurtenetxe en los laterales. Beñat ha vuelto al centro del campo, Viguera se ha colocado a la izquierda y Williams ha ocupado la punta tras el descanso que el técnico ha concedido a Aduriz. Caras nuevas para un sistema conocido, puesto que el Athletic ha mantenido su planteamiento habitual de presionar en el centro del campo para obstaculizar la salida del Torino. El problema es que al equipo de Ventura le importa poco ceder el mando a sus rivales, por lo que han sido los rojiblancos los que han controlado el balón, mientras los locales han juntado las filas a la espera de jugar sus bazas.

No se antojaba un encuentro sencillo para el Athletic, pero en una de sus primeras acciones, los de Valverde han sacado petróleo del Comunale. Una destacada jugada de Viguera por la izquierda la ha culminado el riojano con un centro que ha permitido a Williams estrenarse como goleador con el primer equipo. Era la situación ideal y casi inesperada viendo el planteamiento del partido, aunque no ha tardado mucho el Torino en despertar y mostrar las bazas que le han llevado a escalar posiciones en el Calcio y encadenar diez jornadas sin perder. Para liberarse de la presión rojiblanca, los de Ventura han optado por sacar el balón con rupturas de los centrales, evitando todo lo posible la circulación del balón en un poblado centro del campo. Y en posiciones de ataque, El Kaddouri, Martínez y Maxi López han formado una sociedad que ha traído de cabeza a los defensas rojiblancos. Tanto es así que en el 18, el delantero argentino ha empatado tras una gran acción de los 'granata', y a partir de ahí, el Torino ha apostado por la velocidad de sus acciones y ha culminado una primera parte de menos a más con el segundo gol de Maxi López, unos instantes después de que Martínez hubiera desaprovechado una ocasión clarísima.

Cambio de sistema

El 2-1 se antojaba el resultado más justo tras lo visto en los primeros 45 minutos, donde el Athletic ha sufrido en exceso en la banda izquierda, donde Aurtenetxe ha vuelto a evidenciar su falta de ritmo. Al menos en la segunda parte, el partido ha bajado de revoluciones, lo que ha permitido a los de Valverde estar más cómodos sobre el campo. Los turineses han tenido menos opciones de desbordar al Athletic, y en mitad de un partido trabado, Valverde ha sacudido a su equipo con un doble cambio que ha conllevado un nuevo sistema de juego. Iraola y Gurpegui han salido en el 56' por Aurtenetxe y Viguera, con lo que los rojiblancos han 'copiado' el 3-5-2 del Torino. Etxeita, Laporte y Gurpegui han formado la línea de tres centrales, con Iraola y De Marcos de carrileros, con Beñat, Rico y San José en el centro del campo, y Muniain y Williams delante (después sustituido por el reaparecido Kike Sola). El cambio ha servido para cerrar espacios a un Torino que desde ese momento no ha tenido la profundidad de la primera parte. Además, los turineses han perdido fuelle, y el Athletic ha crecido para empatar en una acción a balón parado que ha rematado Gurpegui en el 72'.

En el tramo final, el duelo se ha desarrollado bajo control bilbaíno. Mejor colocados en el campo, con mayor capacidad física, el Athletic ha tenido sus opciones gracias al buen número de faltas que han tenido a favor en las inmediaciones del área de Castellazi. En una de ellas, San José ha mandado el balón al larguero, y en el 89', Beñat ha rozado el palo en un gran lanzamiento directo. Los de Valverde han terminado el partido volcados en el área rival, en busca de un triunfo que no ha llegado, aunque el empate a dos y las sensaciones de la segunda parte hacen ser optimistas de cara a seguir en la competición, aunque habrá que tener en cuenta en San Mamés la velocidad en ataque del Torino, su gran peligro.