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«Estoy satisfecho de cómo ha estado el equipo. Hemos jugado muchísimos minutos con un marcador en contra. El fútbol nos está dando muy poco», lamentó Marcelino García Toral, quien anoche se mostró satisfecho por el rendimiento de los suyos. Muy lejos de su terrible ... enfado ante el Cádiz y de los reproches por la escasez ofensiva ante el Levante, en esta ocasión dijo no tener queja. «Los jugadores están tristes porque tienen la sensación de que merecían más».
Marcelino reveló haberse encontrado un equipo abatido en el vestuario e indicó que «les he dicho que no tenemos que estar tristes, que tristes teníamos que estar el día del Cádiz». Esa noche, añadió, el partido fue tan malo que un equipo sólo «se parecía al otro en la camiseta».
El asturiano insistió en que le gustó lo que vio. «Fuimos intensos y pusimos todo para ganar. Hemos salido desde el primer minuto a por el partido, fuimos presionantes y tuvimos llegadas, aunque quizá nos faltó un poco más de remate», resumió.
El criterio del entrenador es que el suyo no es un equipo cuesta abajo tras sumar apenas dos puntos en tres partidos ante rivales de la zona baja. Al contrario, su diagnóstico es que el partido de anoche apunta a una mejoría. «Tras un partido muy malo ante el Cádiz, el equipo ha reaccionado bien. Estamos en buena línea. Hoy estoy satisfecho con lo que he visto», agregó.
El entrenador cree que su equipo tuvo «buen criterio» en el juego y que sólo lamentó el infortunio en los dos goles que cedió. Lamentó la mala suerte en ambos y defendió incluso el córner en corto que sacaron sus jugadores en el 1-2. Muniain perdió la pelota en el centro del campo y el contragolpe acabó con gol andaluz. Es extraño que se optara por un saque de esquina en corto cuando los dos centrales subieron a rematar, pero el técnico mantuvo que estuvo bien jugado porque «estábamos en superioridad en esa zona de tres contra dos».
Sus jugadores siguieron por el mismo camino. «Hemos hecho muchas cosas buenas para ganar, pero dos errores nos han penalizado. Hay errores que hay que evitar porque nos penalizan demasiado», lamentó Raúl García.
Al entrenador le duele lo sucedido por la afición. «Con este ambiente es una grandísima pena no darles los tres puntos porque está claro que nos han ayudado mucho y que los jugadores se sintieron arropados».
El técnico insistió en que «en el fútbol está todo muy igualado y, por tanto, hay muy poca diferencia en ganar y no ganar. La diferencia está en el acierto».
Y eso, remachó, es lo que les pasó a los suyos. «Es difícil encajar que no hayamos ganado cuando nos habíamos puesto en ventaja y cuando después de recibir dos goles, que hay que verlos, nos fuimos a por ellos. Tengo ganas de que nosotros metamos un gol como el segundo de ellos. El equipo tuvo actitud, trabajo y juego, con el único pero de que nos metieron dos goles y en las últimas jornadas no somos capaces de mantener la portería a cero», explicó.
«Contento con el empate porque no es fácil empatar aquí», se felicitó Robert Moreno, el entrenador del Granada. «Hemos sido capaces de remontar un gol en el minuto diez. Estoy muy orgulloso porque hemos sido capaces de hacer frente a lesiones de jugadores como Machís, Germán y Rochina. Es muy difícil jugar en este estadio con un público que lleva en volandas a los suyos», se felicitó el técnico, quien vio el partido desde la grada porque anoche cumplió el primero de sus dos partidos de sanción.
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