Marcelino: «Corrimos casi 150 km en 120 minutos y estaremos como trapos, pero debemos demostrar lo que llevamos dentro»

El Athletic gastó lo que no tenía ante el Barcelona y, más allá del cansancio, cuenta con las ausencias de los lesionados Unai Vencedor, Oihan Sancet y Asier Villalibre. Yeray sigue siendo duda por un problema físico «leve», pero Marcelino no ha querido aventurar nada y ha dejado en el aire el concurso del central. Pero esto no es todo porque Iker Muniain acaba de dar positivo por coronavirus y se perderá el duelo en Vallecas. «Las bajas siempre sientan mal, se reducen las posibilidades de elección. Es algo con lo que llevamos conviviendo bastante tiempo y habrá que aceptarlo», ha comentado el de Careñes sobre los estragos que causa la pandemia. Con este panorama, el once que presentará ante el Rayo sufrirá modificaciones respecto al choque del jueves. Unai Simón regresará bajo los palos, Balenziaga entrará por Yuri -lo ha avanzado el propio técnico- y todo apunta a que Berenguer entrará por el capitán. Luego habrá que ver si siguen De Marcos y Vesga o, por contra, dejarán su sitio a Lekue y Zarraga.

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El Athletic visita a un rival que no hace prisioneros en su campo. El Rayo todavía no ha perdido en Vallecas y es el anfitrión más solvente de la Liga. Marcelino lo sabe y por eso subraya el potencial competitivo de los de Iraola. «Están haciendo una temporada buenísima, afianzados por los resultados en casa. Son mejores que los del Real Madrid. De diez partidos han ganado ocho y empatado diez. Son números...». No le ha hecho falta acabar la frase. «Si a domicilio tuvieran un rendimiento mediano estarían aún más arriba», ha manifestado el entrenador rojiblanco. «Tienen una idea de juego muy clara, una plantilla bien estructurada y un campo diferente a los demás en Primera División», ha apuntado sobre las dimensiones del estadio vallecano. «Optimizan bien sus recursos gracias al buen trabajo de su entrenador».

Las buenas actuaciones en la Copa centran todas las miradas, pero a Marcelino le molesta que se prioricen las competiciones. Confiesa que eso le «altera». No concibe aparcar un torneo para volcar todos sus esfuerzos en el otro, en este caso contemporizar en el campeonato de la regularidad y pisar a fondo en el formato del k.o. «Los profesionales tenemos que competir cada partido al máximo nivel. Cuanto más competitivos seamos en la Liga más posibilidades tendremos de pasar en la Copa. Nuestra obligación es intentar ganar todos los encuentros. Para eso -ha reclacado-, nuestro equipo requiere de la máxima tensión, esfuerzo y acierto». De ahí que vaya al Vallecas con esa mentalidad, la de salir con el cuchillo entre los dientes y cazar un triunfo que refuerce aún más las convicciones de la plantilla.

Solo tiene al Rayo entre ceja y ceja, un compromiso que precede un período de diez días sin compromisos. Una ventana en la que descansar y prepararse para el Madrid, pero con la obligación de darlo todo y sumar frente a los madrileños. «Atacan bien y rápido. La verticalidad es su arma importante. Su banda izquierda es poderosa y son solidarios. Es un equipo muy difícil. No descubro nada, ahí están los datos». En la formación rayista está Unai López, cortado por el Athletic hace unos meses, aunque el de Careñes ha precisado que él no tomó la decisión sino que participó en ella. «Marcelino no decidió unilateralmente que saliera Unai, sino participó en ella junto a otras personas. Marcelino no decide, Marcelino decide alineaciones».