El último servicio de Lopetegui al Sevilla

El cuadro del Sánchez Pizjuán ha empezado la temporada de manera horrorosa. Ha perdido cuatro partidos, ganado uno y empatado dos. ¿Qué supone? Que esté un punto por encima del descenso y que haya recibido dianas en todos los encuentros. Y que la afición andaluza pida cabezas. El pasado sábado, después de la derrota contra el Atlético, hubo pañoladas, gritos... Y se produjo una reunión en las altas esferas que no tomaron ninguna decisión sobre el futuro de Lopetegui, que se ha quedado con Monchi como única persona que le respalda.

Y este martes también se produjo un cónclave entre todos los altos cargos del conjunto andaluz. Estaban incluso los abogados del club. Pero, «por el bien del Sevilla» y la inminencia del duelo contra el Dortmund para el futuro hispalense en la Champions, también por «temas económicos», algo así como la indemnización, y porque todavía no estaba cerrado el pacto con Sampaoli se decidió que este miércoles el guipuzcoano estuviera en el banquillo.

La historia es qué ocurriría en caso de que Lopetegui sume el primer triunfo de la competición continental. ¿Se le echa y no estaría en el banquillo contra el Athletic? Todo apunta a que sí. Que Sampaoli, ese volcánico entrenador que ya estuvo en el conjunto hispalense y que también ha dirigido a la selección de Argentina, el Olympique de Marsella, el Santos y que sigue los postulados de Marcelo Bielsa.

En su anterior etapa en el Pizjuán quedó cuarto y abandonó el club para acudir al combinado albiceleste. Ahora parece que volverá. Eso sí, con condiciones. En principio, un contrato de dos temporadas. Y también una serie de refuerzos en el mercado de invierno, ya que considera que el equipo cuenta con varias deficiencias, sobre todo en defensa. De hecho, se quedó Lopetegui sin sus dos principales baluartes, Diego Carlos y Koundé. Y se ha contratado a Marcao, que todavía no ha jugado, y al joven Nianzou, que todavía está por hacer.