El Athletic enterró definitivamente sus aspiraciones europeas después de un flojo encuentro. La temprana expulsión de Unai Simón mediatizó el partido y la inferioridad numérica fue un obstáculo insuperable para los de Garitano. Se presumía un partido áspero, con ambos equipos lidiando por objetivos contrapuestos ... pero vitales. El Leganés se presentó en San Mamés con una meritoria racha que le otorgaba esperanzas reales de mantener la categoría pero también con numerosas e importantes bajas.

Publicidad

El vasco Aguirre modeló su estrategia táctica basada en un rocoso sistema, 1-5-4-1, con los imberbes Garrido y Bryan Gil liderando la apuesta ofensiva. El Athletic presentó importantes novedades en su once. Yeray y Yuri, completaron una meteórica recuperación de sus dolencias físicas. Dani García, un habitual en la escuadra titular, tuvo que esperar en el banquillo ante el notable rendimiento de Unai López y Vesga contra el Levante.

El partido discurrió en sus primeros compases por los cauces convencionales. El Athletic, intentando tomar la iniciativa del juego y del partido. El Leganés, por el contrario, confiando en el orden defensivo y esperando pacientemente una oportunidad. Una rápida contra urdida por los visitantes acabó con Simón expulsado. La acción cambió totalmente el planteamiento del partido. Pese a la superioridad numérica Aguirre no se vio acuciado para modificar el dibujo. El Leganés se mostraba paciente, sin urgencias, consciente de que el enfrentamiento se podía hacer largo para sus rivales.

El homenaje a Beñat y San José fue merecido, un reconocimiento a los valores que nos hacen diferentes

Garitano sí se vio obligado a reorganizar a sus jugadores. Vesga retrasó unos metros la posición para ejercer como único medio centro defensivo y le escoltaron Unai López y Muniain. Raúl se alejó del área para acompañar al centro del campo y Williams ocupó la referencia ofensiva.

Publicidad

Tras el descanso, sin que se produjeran alteraciones tácticas, a excepción de una mayor proyección ofensiva de los carrileros del Leganés, el choque discurrió por los mismos derroteros. El Athletic, muy estático en el ataque, no encontró la inspiración para llegar a las inmediaciones de la portería de Cuéllar. Solo era capaz de realizar algunos centros laterales con mucha intención, pero carentes de precisión.

Un tiro de Bryan Gil, ligeramente desviado, y los cambios realizados por el entrenador mexicano, impulsaron al Leganés. Rosales y Mesa rondaron el gol. El mando pasó al equipo forastero y Guerrero desniveló el marcador con un gol revisado por el VAR.

Publicidad

El equipo de Aguirre no perdió la compostura en la parcela defensiva, pero Unai López, en un tiro desde la frontal, pudo equilibrar el marcador. Unai Núñez desaprovechó la oportunidad más clara cuando se consumían los minutos del añadido, antes de que el equipo madrileño sentenciara y prolongara el sueño de la permanencia.

Para finalizar resaltar el emotivo, merecido y necesario homenaje del Athletic a Mikel San José y a Beñat Etxebarria en su última cita como jugadores rojiblancos en San Mamés. Un reconocimiento a los valores que nos hacen diferentes. Así debe ser siempre, con diez o con trescientos partidos en el historial.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Accede todo un mes por solo 0,99€

Publicidad