El último partido oficial de Iñigo fue contra el Alzira en la Copa. moisés castell

Iñigo Martínez cumple cinco años vestido de rojo y blanco

El 30 de enero de 2018, el Athletic oficializó el fichaje del central, el jugador más caro en la historia del club, que sigue lesionado y sin aclarar su futuro a falta de cinco meses para acabar contrato

Robert Basic

Bilbao

Domingo, 29 de enero 2023

Hace cinco años, el 30 de enero de 2018, el Athletic oficializó el fichaje de Iñigo Martínez. Ibaigane depositó en la Liga los 32 millones correspondientes a su cláusula de rescisión –la compra más cara en la historia del club– y extinguió su «contrato de ... trabajo» con la Real Sociedad. Lo hizo un día después de la salida de Aymeric Laporte rumbo al Manchester City, que pagó 65 millones por el de Agen. Los rojiblancos emplearon la mitad del dinero para atar a uno de los mejores centrales de la Liga, quien estampó su firma en un contrato de cinco temporadas y media y cuya libertad se tasó en 80 millones. El documento firmado hace un lustro expira en cinco meses y sigue sin actualizarse, pendiente de ser discutido con un jugador que sigue lesionado y sin aclarar su futuro.

Publicidad

Iñigo atraviesa por una temporada compleja. En verano, durante el 'stage' de Alemania, al central le llegaron los cantos de sirena del Camp Nou y el ambiente se enrareció. El club defendió su patrimonio deportivo y cerró cualquier posibilidad de traspaso. El presidente del Athletic, Jon Uriarte, declaró que el de Ondarroa era una pieza clave. «Espero que esté muchos años con nosotros», dijo en agosto, poco después de que el defensa cayera lesionado en el amistoso ante el Newcastle. «Sufre molestias leves en el tendón rotuliano de su rodilla izquierda», informaron los médicos. Esas «molestas leves» se tradujeron en una baja de mes y medio y la pérdida de las cuatro primeras jornadas. Reapareció ante el Elche, pero sus problemas físicos se reprodujeron y ahora lleva sin competir desde noviembre.

Fascitis plantar

El último partido de la Liga de Iñigo fue el 11 de noviembre en Girona, y el de Copa, nueve días después en Alzira. Luego llegó el parón mundialista. Con la competición retomada, el defensa causó baja por una «fascitis plantar» que le tiene ya un mes entre algodones. Entre el revuelo levantado por el Barça y las lesiones, además de no avanzar en su renovación y verse fuera de Qatar, el de Ondarroa no acaba de meterse en la dinámica colectiva y ofrecer su mejor nivel. Cuando lo hace, cuando está en perfecto estado de revista, es uno de los centrales top del campeonato. Lleva tiempo sin vestirse de líder en el eje de la zaga rojiblanca. Solo ha disputado 10 de los 24 partidos posibles y consumido menos de la mitad de los minutos ligueros (810 de los 1.710 totales).

Desde el 1 de enero, Iñigo está libre de negociar con otro equipo. El mercado de invierno acaba este martes y salvo algún sorprendente movimiento de última hora, el central seguirá en Bilbao como mínimo hasta junio. En la última información publicada por este periódico se explicaba que no ha habido acercamientos entre el jugador y el club. Algunos de los ahora directivos dijeron en la campaña electoral que la renovación del de Ondarroa era una prioridad. De momento, sigue sin cerrarse; mientras, juegan Yeray, Vivian y Paredes. Y compiten.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Accede todo un mes por solo 0,99€

Publicidad