El Elche, los peligros de un enemigo sin ninguna presión
El Athletic no debe confiarse de un rival ya descendido que ha obtenido sus mejores resultdos tras perder la categoría
Iñigo Agiriano
Sábado, 27 de mayo 2023, 20:06
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Iñigo Agiriano
Sábado, 27 de mayo 2023, 20:06
La temporada del Elche ha sido un auténtico viacrucis. La plantilla era una de las más débiles del campeonato y las decisiones de su propietario, Christian Bragarnik tampoco han ayudado. Destituyó a Francisco al poco de empezar para volver a fichar a Almirón, que había ... sido cesado la temporada anterior. El argentino duró apenas un mes y dejó su puesto a Pablo Machín. Fue con el técnico soriano cuando el Elche comenzó a dar la sensación de ser un equipo trabajado. Los resultados seguían sin llegar, pero se mostró más competitivo. A comienzos de marzo, jugaron ante el Valladolid posiblemente el mejor partido de la temporada, pero, tras el choque, Bragarnik destituyó a Machín y trajo a Sebastian Beccacece. La decisión estaba enfocada a la temporada que viene. La idea era que el argentino tuviera unos meses para conocer al equipo y los jugadores antes de comenzar la pretemporada. Y lo cierto es que al Elche le ha salido bien. Beccacece ha mejorado a los suyos, y desde que se confirmó el descenso no ha perdido ninguno de sus tres partidos. Sus jugadores parecen haberse desprendido de una gran losa; juegan sin complejos, y ejecutan correctamente los planteamientos de su entrenador.
Las limitaciones siguen ahí y son evidentes, pero el joven técnico ha logrado contagiar su intensidad a sus muchachos. Por primera vez en la temporada, el Elche es un equipo que tiene las ideas claras.
Sistema y Modelo de juego
Como ya demostró en Argentina, especialmente en Defensa y Justicia, Beccacece es un técnico interesante, cuyos equipos apuestan por un fútbol vistoso, de posesión y ataque.
Con él, hablar de un sistema concreto no tendría sentido; sus jugadores gozan de mucha libertad para moverse por el campo y él mismo cambia de dibujo varias veces durante los partidos. La presencia de Carlos Clerc, un lateral, como central izquierdo, permite a Beccacece alternar entre la línea de cuatro y la de tres, en función del momento del partido o del poseedor del balón. En salida, el equipo forma en 4-1-1-4, con los laterales muy bajos y los extremos altos. Los dos medios centros se ubican siempre en alturas diferentes, y en ocasiones caen a banda, a esos espacios creados entre el lateral y el extremo, para recibir libres de marca. El rol de los delanteros es clave para el sistema del argentino, obligados a descender constantemente para encontrar de cara a la línea anterior. En el último encuentro ante el Sevilla, la salida la realizó con línea de tres.
centrales, mantuvo a los dos carrileros en amplitud, pero ganó un jugador en ataque, lo que permitió tener un punta fijo y dos jugadores por detrás, que eran los encargados de descender y combinar. La idea con balón es clara: combinaciones rápidas que permitan terminar en centros laterales. Sin la pelota, el Elche busca apretar alto y presionar sus pérdidas en campo rival, con el claro objetivo de evitar las transiciones, un aspecto en el que los ilicitanos han mejorado mucho en las últimas jornadas. Badía sostiene a los suyos. Las actuaciones de Edgar Badía (13) han evitado esta temporada una auténtica sangría para el Elche. En la defensa los nombres son muchos, pero el rendimiento ha sido negativo en todos los casos. Ni Carmona (40), ni Pol Lirola (24) ni Palacios (14) han jugado bien en la derecha, una posición donde se ha asentado Josan (17) en los últimos partidos. El canterano John (26) ha sido el mejor desde la llegada de Beccacece en el centro de la zaga, acompañado últimamente por Bigas (6) y Clerc (23), y en ocasiones por Magallán (7). Diego González (4), Enzo Roco (3) o Gonzalo Verdú (5) no parecen contar en exceso para el técnico argentino. En el carril izquierdo han participado sus dos compatriotas, Lautaro Blanco (2) y Nico Fernández (22) y sus actuaciones han sido positivas.
Beccacece encuentra su pareja
Gumbau (20) y Fidel (16) ha sido la pareja de medios centro de Beccacece siempre que han estado disponibles. Ambos han rendido a buen nivel. Los dos tienen una bonita zurda y calidad para la distribución. El catalán actúa por detrás, como único medio centro, mientras que Fidel se mueve con libertad en tres cuartos. Mascarell (21) y Guti (8) han perdido importancia desde la llegada del argentino, mientras que Pape Cheikh (12) apenas ha participado.
Boyé hace sistema
A pesar de que sus cifras anotadoras han disminuido esta campaña, Lucas Boyé (9) es uno de esos delanteros fundamentales para su equipo por sus movimientos y su capacidad para retener el balón y permitir las incorporaciones de sus compañeros. Junto al argentino ha actuado Nteka (18), un jugador muy poderoso físicamente, pero al que le falta finura. Eze Ponce (19) ha sido el sustituto habitual de ambos. Pere Milla (10), el máximo goleador, apenas ha jugado en los últimos partidos debido a una lesión que arrastra desde hace meses, aunque ya tuvo minutos ante el Sevilla. Por último, Tete Morente (11) parece revitalizado por la llegada de Beccacece. Partiendo desde la banda, el extremo gaditano ha dejado actuaciones de enorme mérito.
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