De gaupasa en Seúl para ver la final

Estarán en esta ciudad hasta el 22 de abril. Con anterioridad, se pasaron un mes en India. Allí vieron el partido de cuartos de final contra el Barcelona. Y lo festejaron a lo grande.Todavía lo cuentan y se parten de risa estos dos jóvenes de 20 años. «Fue un poco locura porque era tarde. Y estábamos en la azotea y todos los del segundo piso nos subieron a increpar porque les despertamos con los goles del Athletic. Nos volvimos locos, a las cuatro de mañana en India. La gente en la calle estaban flipando», se ríen juntos.

Y si el Athletic supera al Mallorca en Sevilla, seguro que sorprenderán a más de uno con su celebración. «Hemos visto que hay una ría en Seúl y habría que tirarse aunque el agua esté congelada –la mínima es de seis grados en abril–. Si no hubiera sido en Seúl, hubiera sido enSevilla o en Bilbao. Ya toca», dicen. Y luego coinciden en otra 'locura'. «Me rapo la cabeza y tengo un tatuaje del Athletic que habrá que acompañarlo con la fecha», adelanta Méndez. Y su compañero asiente: «Nos haremos un tatuaje al 100%».

Ellos dan por seguro el triunfo. «Es el año. Aurten bai!», se animan ambos. «Lo tenemos todo a nuestro favor. Somos favoritos. Es un 3-1, con goles de Guruzeta, Sancet y de Beñat Prados, su primer gol en el Athletic tiene que ser en la final».

Ellos están deseando que arranque el encuentro en La Cartuja. Pero tratan de no perderse ningún duelo de los vizcaínos, primero en India y ahora en Corea del Sur. «Vemos los partidos en la televisión en casa. Es un poco pirata –confiesan–. Los encuentros importantes suelen ser a las cuatro o cinco de la mañana. El horario es horrible. Y los solemos ver nosotros solos porque los demás que hacen la carrera con nosotros no son muy aficionados», aseguran los dos, que tampoco se olvidan de cómo se enteraron de que el Athletic se había clasificado para el duelo de dentro de unos días.

La vuelta de semifinales contra el Atlético fue tarde; jueves enBilbao, viernes de madrugada en Seúl. «Eran las 5.30 horas. Vimos la primera parte y cuando marcaron los Williams ya nos quedamos tranquilos. Así que nos dormimos y tuvimos que ver los resúmenes al día siguiente», ríen.