La estatua de una niña frente a San Mamés rinde homenaje a las futbolistas

La efigie se ha inaugurado minutos antes de la presentación ya en el interior de La Catedral del programa de actos para la final de la Liga de Campeones femenina que se juega en San Mamés el próximo 25 de mayo. La organización pretendía que fuera el golpe de efecto del mismo. Y lo ha conseguido. De hecho, la primera convocatoria a los medios ha sido en la explanada y veinte minutos después se procedía en el interior del campo a la rueda de Prensa. Han acudido a la presentación representantes de las instituciones y federaciones vascas y española, UEFA y Athletic. La organización pretende batir el récord de asistencia en la final de Múnich en 2012, que se situó en 50.212 espectadores.

Ocho equipos en cuartos de final de la competición aspiran a llegar a Bilbao. Son del Barcelona, el Brann noruego, el Ajax de Países Bajos, el Chelsea inglés, el Benfica portugués, el Olympique Lyon francés y el Hacken sueco.

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No será la primera vez que Bilbao y San Mamés acoja partidos internacionales en sus fases finales europeas, tanto en competiciones masculinas como femeninas. El viejo San Mamés ya albergó una final de la Copa de la UEFA en 1977, que enfrentó a Athletic y Juventus y por aquel entonces se jugaba a doble partido. Los italianos ganaron el título.

Más recientemente, ya en el nuevo estadio, Bilbao acogió dos encuentros de cuartos de final y uno de la semifinal de la UEFA Women's Champions League 2019-20, que se celebró en formato de fase final a ocho sin público por la pandemia. Además, en mayo de 2018 se disputaron en La Catedral las finales de la Challenge Cup y Champions Cup de rugby, los torneos más importantes del continente y que volverán a la capital vizcaína en 2026.