Espanyol 1-2 Athletic
El Athletic se concentra en la LigaJornada 28 ·
El equipo de Valverde rompe su mala racha histórica en casa del Espanyol y, tras el batacazo en la Copa, logra una victoria muy importante en su lucha por EuropaSecciones
Servicios
Destacamos
Edición
Espanyol 1-2 Athletic
El Athletic se concentra en la LigaJornada 28 ·
El equipo de Valverde rompe su mala racha histórica en casa del Espanyol y, tras el batacazo en la Copa, logra una victoria muy importante en su lucha por EuropaQuizá la estadística más extraña e inexplicable que el Athletic arrastraba en la Liga -la de sus 25 años consecutivos sin vencer en casa del Espanyol- saltó por fin este sábado por los aires. En una explosión controlada, podría decirse. Concentrados en su trabajo, sin ... mirarse la herida de la Copa, los rojiblancos se impusieron al Espanyol con la autoridad que acostumbran a demostrar ante los rivales del pozo de la tabla. Es cierto que el resultado se comprimió al máximo al final tras un error de Unai Simón, que volvía al once, pero en realidad el equipo de Valverde tuvo todo bajo control. Y no solo eso. Cuando necesitó un golpe de suerte, también lo disfrutó. Fue al borde del descanso, en un golazo de Braithwaite que Munuera Montero anuló como se anulan en este nuevo fútbol tecnologizado y antinatural algunos goles: sin que nadie lo entienda bien, y menos los perjudicados.
Espanyol
Pacheco; Rubén Sánchez (Aleix Vidal, min.46), Cabrera, Montes, Óscar Gil (Calero, min.77); Gragera (Denis Suárez, min.83), Edu Expósito (Nico Melamed, min.57); Puado (Vini Souza, min.83), Darder, Braithwaite y Joselu.
1
-
2
Athletic
Unai Simón; De Marcos (Paredes, min.89), Vivian, Iñigo Martínez (Yeray, min.79), Yuri; Dani García (Ander Herrera, min.79), Vesga; Iñaki Williams, Sancet (Muniain, min.68), Berenguer (Nico Williams, min.68) y Guruzeta.
Goles. 0-1, min.22: Iñaki Williams; 0-2, min.75: Nico Williams; 1-2, min.90: Darder
Árbitro Munuera Montero (comité andaluz). Expulsó a Aleix Vidal (min.91 y min.91). Amonestó a De Marcos (min.21), Dani García (min.30), Sancet (min.44), Gragera (min.53), Óscar Gil (min.59), Calero (min.78).
La diferencia entre los dos equipos, en cualquier caso, fue mayor que la que acabó indicando el marcador. Y tuvo una explicación muy clara. El Athletic, con Dani García y Vesga en la sala de máquinas, fue un equipo reconocible que se dedicó a jugar a los que viene jugando, con menor o mayor fortuna, toda la temporada. Se desplegó con intensidad, apretó mucho por dentro y buscó las bandas, sobre la derecha, donde Iñaki Williams hizo mucho daño desde el principio. Como sucedió contra Osasuna fue el jugador más desequilibrante y, si ya el martes se desquitó de sus casi cinco meses sin marcar, este sábado detuvo su mala racha en la Liga, donde no había visto puerta en los trece últimos partidos.
Noticia Relacionada
El nuevo Espanyol de Luis García, por el contrario, fue un grupo flojo y sin costuras que, para el cuarto de hora, ya estaba provocando temblores y desconcierto en las gradas de Cornellà-El Prat. También asombro, la verdad. Y es que el estilo que parece estar dispuesto a imponer el nuevo técnico españolista, saliendo con el balón jugado desde atrás, arriesgando en defensa y en la circulación, incluso buscando combinaciones estelares por dentro, es lo último que se espera de un equipo hundido que, en su campo, solo había ganado tres partidos de los trece que había disputado hasta este sábado. Por lo visto, y pese a su nula experiencia como técnico más allá del fútbol juvenil, Luis García tiene las ideas clarísimas, unas convicciones de hierro. O tal vez sea que ha visto en sus futbolistas una calidad que los demás no somos capaces de ver. Si la tienen tendrán que demostrarlo en los próximos partidos. Este sábado lo suyo fue una especie de excentricidad temeraria, como si alguien cansado de nadar y ya con graves problemas para alcanzar la orilla, se pone a practicar el estilo mariposa. Algo así.
El Athletic aprovechó las circunstancias para asentarse y controlar el juego desde el pitido inicial. Los rojiblancos salieron enchufados, conscientes de su obligación de exhibir una actitud muy seria tras el batacazo del martes. Y aunque el fútbol de ambos equipos durante los primeros veinte minutos fue un muermo tremendo, la superioridad visitante se hizo evidente. Iñaki Williams la materializó en el minuto 21 tras un gran pase largo de Dani García. Nada pudieron hacer Óscar Gil y Pacheco ante la carrera y el disparo cruzado del delantero rojiblanco.
La polémica
El gol entonó al Athletic, que se fue sintiendo más cómodo en la misma medida que el Espanyol se sumía en una mezcla explosiva de desconcierto y frustración. Sancet tuvo en su cabeza el 0-2, tras un perfecto pase de Williams, pero su cabezazo no tuvo ni fuerza ni colocación. Fue la primera ocasión clara que desperdició el equipo de Valverde. En la segunda parte hubo más, una de Guruzeta en el minuto 57 que detuvo Pacheco y, sobre todo, otra el minuto 67 de nuevo con Sancet y el mayor de los Williams como protagonistas. Esta vez fue Sancet el que habilitó a Iñaki, que cometió un error de bulto muy parecido al primero de su hermano Nico ante Osasuna. Por un momento, fue inevitable preguntarse si el Athletic volvería a pagar muy caros sus errores. Sin embargo, Nico Williams, que entró al campo dispuesto a hacer sangre en el minuto 68, se encargó de espantar esos temores marcando un bello gol con la derecha a falta de un cuarto de hora.
🆙📈
— Athletic Club (@AthleticClub) April 8, 2023
¡Adelante, leones!
✊ ¡Seguimos! #EspanyolAthletic #AthleticClub 🦁 pic.twitter.com/kDeSAiCXc4
Pese a su gol en el minuto 90, no se puede decir que el Espanyol reaccionase. Ese 1-2 de Darder no pasó de ser un casualidad, ya que el único peligro de los periquitos fue una ocasión de Melamed. En realidad, los de Luis García no dejaron en ningún momento de pensar en la jugada que les martirizó. Se produjo en el minuto 44. Munuera Montero, tras consultar el vídeo, anuló un golazo extraordinario a Braithwaite por unas manos involuntarias previas de Joselu. El delantero gallego se lanzó a rematar de cabeza y no pudo evitar que el balón le rebotara en el brazo al que le estaba agarrando Vivian. A algunos la anulación nos recordó a la del pasado 12 de marzo en San Mamés, cuando Gil Manzano invalidó el gol del empate ante el Barça porque Muniain tocó el balón con la mano de forma involuntaria, en un gesto instintivo para protegerse de la pierna que había levantado De Jong. Valverde reaccionó entonces con deportividad. Se lamentó, por supuesto, pero reconoció que en este nuevo fútbol el VAR y los árbitros son impredecibles y que unas veces te dan y otras te quitan sin que uno sepa bien el motivo. El tiempo le ha dado la razón.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Noticias recomendadas
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.