El enfado del técnico del Rangers con sus jugadores antes de recibir al Athletic

Muy enfadado por lo que acababa de ver sobre el césped, el preparador escocés puso el foco en los jugadores y anunció medidas para intentar reconducir la situación y salvar una temporada que amenaza con naufragio. El ambiente enrarecido del vestuario rival tras el tercer traspié consecutivo en Ibrox –cayó contra el Motherwell (1-2), Hibernian (0-2) y ante el Fenerbahce en la Europa League (1-2), aunque se clasificó a penaltis– no parece el escenario ideal para afrontar una eliminatoria continental.

Barry no ocultó su «decepción» y se mostró muy crítico con la actitud de sus futbolistas. Con el equipo a 13 puntos del Celtic –líder de la competición doméstica– y eliminado ya de la Copa, Europa se presenta como única tabla de salvación de los Light Blue. Una vez detectados los males del equipo, Ferguson parece decidido a meter el bisturí. De hecho, además de cambios en el once, baraja también variar su sistema de juego para conseguir mayor consistencia defensiva –ha encajado dos goles por partido de media en los últimos siete compromisos–.

«Este no es el Rangers. Está muy lejos de serlo. Los encuentros europeos y contra el Celtic –los Light Blue se impusieron 2-3– son los más fáciles de afrontar. Si no puedes levantarte para los partidos como el de hoy –por el sábado–,​entonces no deberías jugar. Un estadio abarrotado y dimos un espectáculo así», lanzó el excapitán del Rangers y actual inquilino del banquillo de Ibrox tras caer ante el Hibernian.

Un error del meta Jack Butland permitió a Dylan Levitt adelantar al Hibernian a los ocho minutos y Martin Boyle aprovechó la debilidad defensiva del rival para sentenciar a los 69. «He decidido qué camino debemos seguir hasta final de temporada y puede que no sea agradable de ver. Como aficionado del Rangers quieres ver un fútbol fluido y atractivo, pero no creo que podamos hacerlo. Habrá una serie de cambios el jueves», aseguró con cara de pocos amigos.

Una de las novedades podría estar precisamente bajo palos, ya que el meta Butland no ha estado muy acertado en los últimos encuentros. «Le dije a Jack que cometió un grave error. Él lo entiende», aseguró Ferguson. Pero puede no ser el único damnificado. «Si la gente comete errores, si se descontrola, si no corre tanto como creo que debería, entonces no va a jugar en mi equipo» resaltó Ferguson dejando claro cuáles son algunas de las premisas innegociables de su libreto.

«Vi que el Hibernian quería la victoria más que nosotros y mi trabajo es intentar encontrar un escenario donde eso no suceda en el futuro. Me aseguraré de hacerlo», concluyó. El técnico del Rangers no podrá contar el jueves con el sancionado John Souttar en defensa ni con el centrocampista Mohamed Diomande, pero por las palabras de su entrenador los relevos de ambos no serán las únicas novedades que se registrará el once local ante el Athletic.