La emoción de un padre y un hijo de Ciudad Real en su primera vez en San Mamés: «¡El mejor día de mi vida!»

Laura González

Domingo, 17 de marzo 2024, 08:47 | Actualizado 09:14h.

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«¡Qué maravilla!», «¡Espectacular!», repetían sin parar nada más atravesar este sábado la puerta de entrada de San Mamés Ángel José Regui y su padre, aficionados rojiblancos naturales de la localidad manchega de La Solana, en Ciudad Real, que se estrenaron en La Catedral en el derbi frente al Alavés.

Con una sonrisa imborrable en su rostro, y con la piel de gallina, admiraban todos los rincones del estadio bilbaíno antes de tomar asiento. «¡Qué bonito! Es precioso», repetían incrédulos, con sus bufandas colgadas al cuello. «Hemos gestionado diferentes viajes, hemos ido a Albacete, a Getafe..., pero nunca habíamos estado en San Mamés. Vamos a disfrutar del partido y a por todas», apuntaba José Ángel antes de que arrancara el choque.

En un vídeo difundido en las redes sociales del Athletic, desvelaron que esta pasión rojiblanca les viene de familia. El abuelo del joven estudió en los años 40 en la capital vizcaína peritaje industrial. «Estaba en Deusto y venía a La Catedral a ver partidos. Después me lo inculcó a mí, me trajo una camiseta negra de Iribar, del 'Txopo', y otra a mi hermano firmada por Telmo Zarra, y de ahí mi afición. Luego se la inculqué a mi katxorro», bromea el padre de José Ángel.

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Juntos vivieron su primer partido en San Mamés, un derbi que se saldó con triunfo de los de Ernesto Valverde, gracias al doblete de Guruzeta, en un choque en el que también festejaron por todo lo alto el penalti parado por Unai Simón, antes de que los leones abrieran la lata. Un duelo que coloca al Athletic en puestos de Champions, el último frente a la parroquia rojiblanca antes de encarar la final copera del próximo día 6 en Sevilla.

Un partido que esta familia manchega nunca olvidará. «¡Ha sido el mejor día de mi vida!», confesaba tras el partido José Ángel en el perfil oficial del Athletic en Instagram. «Estoy eternamente agradecido», añadía, recibiendo el aplauso de numerosos aficionados vizcaínos, tras comprobar una vez más cómo la pasión rojiblanca se vive con fuerza fuera del territorio. «Esta gente hace más grande aún al Athletic».