El eje de la defensa, un problema central de Valverde

La línea defensiva es la parcela más solvente del Athletic. Los tres goles encajados en el derbi fueron producto de otros tantos errores gruesos –e individuales– que el equipo pagó con una derrota merecida. Un pase atrás de Nico Williams que jamás debió producirse se transformó en una asistencia perfecta a Kubo que derivó en la pena máxima y la expulsión de Yeray, quien no daba crédito a la decisión tomada por Cuadra Fernández. Lo que vio como punible fue como mucho un 'penaltito', uno de esos que el estamento arbitral prometió no decretar al comienzo del curso y que se materializó en el Reale Arena. La decisión conllevó un triple castigo: gol, roja directa y sanción de un choque al infractor. Sin dos pilares en el eje de la zaga, los rojiblancos aguardan al Madrid.

Habrá que ver cómo evoluciona Iñigo, quien en principio tampoco estaría el miércoles frente al Espanyol en la Copa. La fascitis plantar le tiene alejado de la dinámica del grupo y, de hecho, lleva más de dos meses sin jugar un partido oficial. El último fue ante el Alzira en la Copa, el 13 de noviembre, y desde entonces se ha perdido al Sestao, Betis, Eldense, Osasuna y Real Sociedad. Reaparecer ante el Madrid sería una noticia magnífica, aunque la falta de ritmo sería peligrosa ante un rival de semejante dimensión como el blanco.

En los 20 partidos disputados por el Athletic entre Liga (17) y Copa (3), la pareja de centrales más empleada por Valverde es la formada por Vivian y Yeray. Han formado juntos diez veces, ocho de ellos en el campeonato de la regularidad. Luego está la compuesta por Yeray e Iñigo, que han integrado una sólida sociedad en siete ocasiones. La última combinación es la Vivian-Iñigo, que Txingurri ha empleado en tres encuentros. Si nada cambia de aquí al domingo, ninguna de estas opciones sería homologable ante el Real Madrid. De ahí que el entrenador rojiblanco echaría mano de Paredes, quien se asociaría con el vitoriano en el eje de la defensa. Ya lo ha hecho en el Reale Arena a raíz de la expulsión del baracaldés, por lo que ahora tendría continuidad y estrenaría su condición de titular.

El defensa bilbaíno solo ha sumado 45 minutos en cuatro jornadas de Liga –Cádiz (2), Rayo (1), Almería (19) y Real Sociedad (23)–, siempre saliendo del banquillo en los instantes finales de los partidos. Si no ha disfrutado de más protagonismo es porque tiene por delante a gente de mucho nivel, pero ahora está ante una oportunidad de oro de reivindicarse y demostrar su valía en la élite. Tanto la dirección deportiva como el cuerpo técnico confían en el canterano. Lo demostraron en verano con la cesión de Unai Nuñez al Celta en plena vorágine Barça-Iñigo porque decidieron apostar por él. Debutó ante el Cádiz y ahora apunta a todo un Real Madrid.

Valverde está centrado en el Espanyol, un partido en el que podrá jugar Yeray, y luego pensará en el Madrid y en una pareja de centrales inédita, con la que ya trabaja en Lezama.