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El Athletic está a un puñado de horas de levantar el telón de la Liga contra el Getafe en San Mamés, donde comenzará oficialmente la temporada de las cuatro competiciones. Aún quedan tres días para pulir detalles, poner a punto a determinados jugadores -Ruiz de ... Galarreta ya entrena con el equipo-, limar aristas de una estructura puesta en pie pero aún en construcción y sacar brillo al fútbol que debe volver a ilusionar tras la campaña de la Copa. Los rojiblancos jugaron su último amistoso ante el Stuttgart, un choque que sobró y se saldó con una goleada en contra que escapa a cualquier valoración objetiva por haberse producido en un contexto extraordinario marcado por un once lleno de canteranos. Lo que merece la pena observar con un poco más de detenimiento es el rendimiento defensivo de los bilbaínos, alejado de la solvencia deseada y que precisa de un blindaje más grueso de cara al inicio liguero.
Amistosos El Athletic ha jugado con Burgos, Racing de Santander, Sporting de Portugal, Osasuna, Aston Villa y Stuttgart.
Goles encajados 14, 10 de ellos ante el Sporting (3), Aston Villa (3) y Stuttgart (4).
Atrás Valverde ha puesto de inicio a seis defensas distintas.
Las pruebas de verano valen para lo que valen, enfocadas en la observación, construcción, test, reparto de minutos, asunción de una idea de juego y experimentos que a veces se quedan solo en eso, en movimientos sin excesivo recorrido o descubrimientos que merecen más rodaje en el tiempo. Conviene recordar una vez más que Ernesto Valverde no ha podido trabajar con muchos futbolistas importantes y que en este sentido la preparación ha cojeado. Aún así, el Athletic sigue siendo un equipo reconocible, con el estilo definido y convencido en lo que hace. Más allá de los resultados -tres victorias y cuatro derrotas, todas a domicilio-, las prestaciones defensivas son las que deben ser ajustadas para recuperar la habitual solidez.
En los siete amistosos disputados, el Athletic ha encajado 14 goles, la cifra más alta desde el verano de 2012, período en el que concedió los mismos en ocho encuentros. El año pasado, cuando el equipo hizo una pretemporada mala en cuanto a resultados -solo una victoria- y luego destapó el tarro de las esencias, solo recibió siete en seis choques. Los números que más se asemejan a los actuales se produjeron en 2020 -covid de por medio- y 2019, cuando el contador se paró en 12. En el otro lado de la balanza se sitúan las fases de preparación de 2022 y 2021, con apenas seis dianas permitidas. Ahora bien, la composición de las líneas defensivas y los futbolistas con los que ha podido contar el técnico del Athletic son también claves para entender estos datos.
Para empezar, Txingurri no ha tenido a ninguno de sus dos porteros titulares, Unai Simón y Julen Agirrezabala, lesionados. Tampoco ha podido echar mano del central internacional Dani Vivian, de permiso por vacaciones. La participación de De Marcos ha sido con cuentagotas -solo dos partidos y 86 minutos- y también Paredes tardó en entrar en la dinámica colectiva por unas molestias musculares. De ahí que la composición de la línea de cuatro de atrás ha sido inédita muchas veces. Valverde solo la ha repetido una vez: contra el Racing de Santander y Sporting de Portugal (Gorosabel, Yeray, Lekue y Yuri). Ante el Burgos improvisó (Gorosabel, Yeray, Yuri y Adama) y ante el Eibar y el Stuttgart tiró bastante de los 'cachorros' (Gorosabel, Egiluz, Duñabeitia, Adama, y Hugo Rincón, Egiluz, Lekue y Adama). Por eso los choques ante Osasuna y Aston Villa son los que realmente deben ser analizadas en clave de juego y confección del bloque.
Contra los rojillos en la Euskal Kopa, el Athletic jugó con un once inicial plagado de titulares y su fútbol convenció. En la defensa salieron De Marcos, Yeray, Paredes y Yuri. En el enfrentamiento con los ingleses, el choque estelar del cartel veraniego, solo hubo una modificación atrás: Gorosabel por el capitán. Aún así, el Athletic encajó tres goles y acabó descosiéndose, pero a nivel competitivo y de pegada no anduvo mal. De este quinteto saldrán los cuatro hombres que formarán la línea de cuatro por delante de Padilla, a la espera de que Vivian recupere el ritmo competitivo. Tres días para trabajar, ajustar piezas y descorchar un curso ilusionante.
Hugo Rincón jugará en el Mirandés en calidad de cedido durante la próxima temporada. El lateral renovó hasta 2028 y luego se formuló una salida para que pueda sumar minutos en el fútbol profesional y regresar más hecho al Athletic, que comunicó ayer la salida del navarro rumbo a Anduva. Este periódico avanzó la decisión del club de ceder al defensa a un equipo en el que dispondría de protagonismo necesario para proseguir con su desarrollo. El Mirandés era una de las opciones, no la única, pero sí la preferida por las experiencias anteriores con los rojiblancos como Dani Vivian, Beñat Prados, Javier Martón, Nico Serrano, Imanol García de Albéniz e Iñigo Vicente, entre otros. A sus 21 años, el de Valtierra necesita acabar de pulirse.
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