El Bilbao Athletic ya mira al play-off

Definitivamente, el Bilbao Athletic ha dado con la tecla. Hace apenas un mes era penúltimo y todo se veía muy negro. No obstante, Jokin Aranbarri ha logrado encajar las piezas, armar un once competitivo capaz de corregir la falta de determinación en las áreas, que tanto acusaban ,y a base de buenos resultados, ha despegado de forma fugaz. Los cachorros lograron en el Nou Estadi su quinta victoria consecutiva, venciendo por 0-2 a todo un Nàstic. Esto hace que dejen de mirar a esos inquietantes puestos de descenso y se ubiquen justo por debajo de las plazas que otorgan un billete al play-off. Una auténtica proeza.

No hubo sorpresas en la puesta de escena de los rojiblancos. Aranbarri volvió a apostar por los que están siendo los principales artífices de esta brillante racha. La única modificación respecto a los anteriores compromisos fue la entrada de Aingeru Olabarrieta, revulsivo del último choque, sustituyendo a un Endika Buján que repetía convocatoria con el primer equipo. En el filial también faltaba Igor Oyono, quien estaba con la selección española sub-17, por lo que Ander Peciña, 'pichichi' del grupo vasco de Tercera Federación en el Basconia con trece dianas -junto a su compañero de equipo Marcos Goñi-, promocionó y debutó en Tarragona, jugando un cuarto de hora.

El buen momento del Bilbao Athletic se podía palpar en la confianza con la que salto a un escenario siempre exigente e imponente como el Nou Estadi, donde el Nàstic sólo había perdido un encuentro esta temporada. Los rojiblancos ejercieron el mando desde el pitido inicial, controlando la posesión, sin pasar apuros y jugando en campo contrario, aunque sin inquietar a Varo en los primeros compases de juego. En esta dinámica, todo parece sonreírle. Incluso hasta la pegada y el balón parado, que habían sido sus talones de Aquiles.

Así, al cumplirse el primer cuarto de hora de choque, Olabarrieta botó un córner que nadie llegó a tocar, hasta que Ibai Sanz remató de cabeza desde el segundo palo para estrenar el marcador. Es el sexto gol esta campaña del delantero baracaldés de 21 años, máximo goleador de su equipo. Después de este primer tanto, el conjunto grana pisó el acelerador, habiendo tramos buenos de ambas escuadras. No obstante, los locales parecían nerviosos, pasados de revoluciones, irascibles y pendientes de las decisiones arbitrales.

El Bilbao Athletic siguió mejor plantado y tuvo otras dos opciones de marcar en la primera mitad por medio de Azkune e Ibon Sánchez. Mientras, el primero que dio trabajo a Mikel Santos fue Víctor Narro, pero el guardameta bilbaíno realizó una gran parada. Éste volvió a demostrar sus grandes reflejos en el segundo tiempo con otra gran intervención a un disparo de Antoñín. En este segundo periodo, el filial rojiblanco se limitó a mover la pelota y minimizar riesgos. Por lo tanto, no hubo apenas ocasiones. El temple que demostraron los cachorros aumentó aún más con la sentencia de Iker Varela a diez minutos desde el final. El extremo batió a Varo con un disparo raso con la zurda desde la frontal del área y dejó el triunfo en bandeja.