La batalla del centro del campo

Fuera de Lezama hay dos opciones con pocas opciones de cuajar, como son Javi Martínez, a quien el Bayern le ha dicho que cuenta con él, e Íñigo Ruiz de Galarreta, con quien no ha habido ninguna maniobra de acercamiento.

Así que con 33 futbolistas en plantilla, el entrenador rojiblanco es consciente de que debe aligerar el número de integrantes del vestuario. Iturraspe y Mikel Rico han recibido la baja, pero todavía le sobrarían uno o dos centrocampistas para cerrar el grupo de 25 fichas.DaniGarcía,San José y Beñat son fijos, por lo que la batalla por seguir se planteará, a priori, entre Vesga, Nolaskoain y Sancet.

Vesga (Leganés) es uno de los tres cedidos del Athletic que regresa. Los otros dos son Cristian Ganea (Numancia) y Andoni López (Almería). El mediocentro vitoriano llega reivindicado desde el club madrileño. Comenzó fuera del once titular, pero finalmente se convirtió en una pieza clave en el esquema de Mauricio Pellegrino, donde ha formado un centro del campo muy sólido con Rubén Pérez y Gumbau.

Peru Nolaskoain pasó de titularen el arranque de Liga conEduardo Berizzo a no contar para Garitano y regresar al filial. El entrenador no le ve como central y lo considera mediocentro, pero tampoco parece un futbolista que tenga la etiqueta de predilecto para Garitano. Renovado hasta 2024, es el que más opciones tiene de salir cedido.

El Athletic asume que necesita rejuvenecer su centro del campo. Los tres jugadores más empleados el pasado curso acabarán la próxima campaña con 30 años o más. Entre la savia nueva más esperada aparece Oihan Sancet, que genera mucha expectación entre los responsables de Lezama. La pasada campaña hizo la pretemporada con el primer equipo, pero regresó al filial y en el segundo partido de Liga se rompió el ligamento cruzado anterior y el menisco interno de la rodilla izquierda. Seis meses después reapareció.

Santi Denia le ha incluido en la primera lista de 25 jugadores para elCampeonato de Europa sub'19 que se juega en Armenia del 14 al 27 de julio. Si entra en la convocatoria final se perderá buena parte de la pretemporada y no estará a plena disposición del entrenador hasta agosto, un hándicap importante que le puede obligar a curtirse en el inicio de temporada en el filial a la espera de otra oportunidad.