Las claves económicas de la 'operación retorno' de Nuñez al Athletic

Hay dos cuestiones claves que los dos clubes deben concretar. Para empezar, cómo se paga la ficha del jugador, que es una de las de mayor envergadura en el Celta, por encima de los 3,5 millones de euros brutos.

En este punto, el tira y afloja indica que el Athletic se sentó en la mesa con una oferta que el Celta considera insuficiente. Los gallegos, lógicamente, quieren que Ibaigane haga frente a la totalidad del contrato. Los vascos, en cambio, pretenden que este pago se reparta entre las dos entidades.

Hay que sellar además un trato sobre una posible opción de recompra, que probablemente se incluirá. Esta cláusula, de todas formas, puede ser opcional.

En todo caso, las fuentes consultadas por este periódico precisan que esa cifra no superaría los entre 7 y 8 millones de euros, lo mismo que ha pagado este verano el club gallego al Athletic después de tenerlo dos años como cedido. A la espera de una rúbrica definitiva, se ha colocado sobre la mesa la cantidad de cuatro millones.

El Athletic se siente fuerte en la negociación porque el Celta ha decidido desprenderse del central, como ya hecho con algún otro compañero de Unai Nuñez con una ficha alta. Carles Pérez, que llegó desde la Roma, se ha ido cedido al Getafe. Los vigueses acaban de fichar a Marcos Alonso y necesitan dar de baja al central de Sestao para poder inscribirle.

Si finalmente se llega a un acuerdo entre los clubes, se abrirá la mesa de negociación entre el Athletic y Nuñez. Cuando el Celta ejecutó este verano la cláusula obligatoria de compra entró en vigor de forma automática un nuevo contrato con el jugador, que se extiende por cinco años.

En caso de que se firme una opción de recompra, hay que llegar a un trato con el defensa vizcaíno ante la perspectiva de que se ejecute dentro de un año.

Por el momento, Nuñez está tranquilo. Ha sido un fijo con todos los entrenadores que ha tenido en el Celta menos los cinco partidos finales de la pasada campaña y los tres de esta con Claudio Giráldez. Su tesis es que en cuanto se cierre el mercado volverá a contar con él si no acaba en Bilbao. Por eso, y porque acaba de ser padre y se va a comprar una casa en Vigo, no ve de mal seguir en el club gallego.