El peor momento: un gol y dos puntos en cuatro partidos de Liga

Williams y la suplencia de Guruzeta fueron la principal novedad en una alineación rojiblanca en la que estaba Paredes, se reafirma Zarraga como pareja de Vesga porque conecta muy bien con Sancet y se añadía el regreso a la formación inicial de Berenguer tras cuatro partidos de suplencia.

Williams marcó en el arreón final del Athletic, pero su gol fue anulado por un fuera de juego de Guruzeta, que tocó levemente la pelota.

El Madrid, con Modric y Kroos en el banquillo, se vio sometido por el impetuoso arranque del Athletic. Los rojiblancos presionaban alto y marcaban el ritmo de partido que les convenía. Valverde lanzó una advertencia que desgraciadamente fue una premonición. «Con el Madrid, cuando piensas que estás jugando bien es cuando marcan». A base de robar arriba y ser verticales, las ocasiones comenzaron a aparecer. Las tuvieron Paredes, Nico e Iñaki Williams.

Pero el que marcó fue Benzema, que firmó un golazo con un gesto técnico al alcance de muy pocos. Se la tiene tomada al Athletic. Es al equipo al que más goles ha anotado, 19. A nadie cogió de sorpresa su diana. Ha visto portería once veces en sus diez últimos duelos con los rojiblancos.

El 0-1 tuvo una incidencia muy negativa para el Athletic, que quedó aturdido y sin capacidad de reacción hasta el descanso. Ceballos y Camavinga manejaban a su antojo el partido desde el centro del campo. El balón fue blanco. Sus apoyos con unos Asensio y Valverde en constante movimiento dejaron impotentes a los rojiblancos. La circulación de la pelota fue imprecisa y la presión arriba ya no hacía ningún daño.

El ataque rojiblanco no fluía. Mendy secaba a Nico Williams, que para colmo remató fatal en una clarísima ocasión, Sancet estaba desconectado y Zarraga se veía superado por los centrocampistas blancos. Asensio tuvo la oportunidad de sentenciar en el minuto 65. Valverde agitó el banquillo en busca de soluciones. Entraron Herrera, Muniain y Guruzeta por Berenguer, Sancet y Zarraga.

Cambió toda la sala de máquinas. Hubo un arreón final al estilo San Mamés que hizo sufrir al Madrid, pero sin encontrar portería. El único que acertó fue Kroos con el 0-2 definitivo.

El Athletic tiene un grave problema ante la portería rival. Valverde se consuela con el número de ocasiones que crean los suyos, pero la realidad es que se trata de un equipo con serias dificultades para encontrar los tres palos en las últimas jornadas. Los últimos cuatro choques de Liga se han cerrado con un único gol (Sancet en el Reale Arena) en 360 minutos.

La estadística de anoche es el resumen del gran lastre rojiblanco: de los 18 remates rojiblancos, sólo un 16,6% fueron a puerta. El Madrid es otra cosa: lanzó diez, cuatro de ellos entre los tres palos y dos a gol.

El Athletic vive su peor momento de la campaña. Desde la reanudación de la Liga tras el Mundial, los rojiblancos sólo han sumado dos puntos (empates con Betis y Osasuna) y dos derrotas, ante Real Sociedad y Real Madrid.

El objetivo marcado al inicio de campaña es Europa, pero los resultados no han llegado ante los equipos de la zona alta de la Liga. Y en el horizonte aparecen Mestalla en Copa y Balaidos con un Celta con el agua al cuello.