Secciones
Servicios
Destacamos
Edición
Ernesto Valverde repitió varias veces durante la pretemporada que la plantilla no estaba cerrada. Era su forma de reconocer que todavía tenía esperanzas de que llegara algún refuerzo y, de paso, de dejar claro que el club estaba trabajando en ello. Al final, sin embargo, ... no ha llegado nadie, descontando a Ruiz de Galarreta, que estaba fichado hace meses, y a Martón, cedido al Mirandés. Ni Laporte, ni Azpilicueta, ni Guillamón, ni Odriozola, ni David García. Se ha contactado con ellos o con sus representantes, se les ha tomado la temperatura, pero la cosa no ha pasado de ahí, de ese preámbulo. De hecho, a ninguno se le ha llegado a hacer una oferta.
Noticia Relacionada
El Athletic, en fin, no se ha podido reforzar tras perder a Iñigo Martínez, el líder de su defensa; una pérdida muy dura para cualquiera, pero todavía más para un equipo en el que varios futbolistas importantes tienen una edad en la que lo más lógico, aunque la dirección deportiva del club no parezca contemplar esta posibilidad, es imaginar un declive en su rendimiento.
¿Ha sorprendido a alguien esta ausencia de refuerzos? Pues lo cierto es que sólo a algunos despistados o soñadores empedernidos. Al resto no porque el escenario está muy claro para todos. El propio Valverde lo explicó el sábado en su rueda de prensa antes de viajar a Mallorca. «Siempre hay pocos movimientos, y cuando hay pocos ya son muchos. Lo normal es que no los haya porque no tenemos demasiadas posibilidades. Todo se centra en dos o tres jugadores, o en un jugador y medio. Estas cosas son así, pero las tenemos asumidas desde hace tiempo», dijo. No le faltaba razón al técnico rojiblanco. El mercado del Athletic es el que es, las operaciones posibles son escasas y muy complicadas, especialmente para una directiva que se mire mucho el bolsillo y no se plantea ni por asomo hacer una fuerte inversión que le descuadre las cuentas.
Las cosas como son: hoy por hoy, y salvo alguna sorpresa coyuntural que pueda llegar a producirse, el Athletic está condenado al autoabastecimiento con su cantera porque ha perdido la capacidad de reforzarse con futbolistas que no sean de Lezama. Los precios le son prohibitivos y su situación económica es muy delicada con la hucha ya casi en las últimas y un déficit estructural de 30 millones. Y no sólo eso. Después de seis años consecutivos fuera de Europa, el Athletic cada vez es un destino menos atractivo para los buenos jugadores vascos de otros equipos. Recalcamos lo de buenos porque estos son los únicos que puede considerarse refuerzos; es decir, aquéllos que llegan para ser titulares y elevar con su sola presencia el nivel competitivo de la plantilla.
La pérdida de capacidad del Athletic para reforzarse es un proceso largo y progresivo que puede certificarse con datos. Una buena manera de hacerlo para tener así la debida perspectiva es detenerse a analizar los fichajes del club en las tres últimas décadas, su cantidad y, sobre todo, su calidad. Veamos. Entre las temporadas 1993-94 y 2003-04, el Athletic hizo un total de 19 fichajes. En aquellos tiempos, a pesar de que la ley Bosman ya empezó a convertirse en un factor negativo a tener en cuenta -la sentencia se dictó en diciembre de 1995-, el club rojiblanco todavía podía considerarse poderoso dentro de su mercado. Digamos que, cuando oían hablar del Athletic, a los hinchas de la Real y de Osasuna les entraban sudores fríos, como a los niños holandeses en su día cuando les hablaban del duque de Alba.
Los dirigentes de Ibaigane no se andaban entonces con minucias ni contemplaciones. ¡Si hasta ficharon al hijo de un presidente de la Real! Cuando salían al mercado lo hacían en busca de jugadores ya contrastados o con un gran futuro por delante. Es decir, de verdaderos refuerzos. Un dato inapelable. De los 19 fichajes de aquel periodo, más de la mitad (10) jugaron más de 100 partidos en el Athletic. Pero esto no es lo mejor. Hasta 9 de ellos disputaron más de 250, palabras mayores, una cifra propia de un gran jugador de club. Hablamos de Larrainzar (289), Alkiza (328), Joseba Etxeberria (514), Urzaiz (419), Lacruz (251), Javi González (254), Ezquerro (260), Tiko (230) y Orbaiz (318). Hubo otros que no llegaron tan lejos, pero lo cierto es que también fueron contratados con una idea ambiciosa. Pensemos, por ejemplo, en Roberto Ríos, el fichaje más caro de la historia del club cuando se realizó, Lizarazu, Mikel Lasa, Ferreira, Alkorta, José Mari, Nagore, Imaz... En realidad, sólo Sívori y Merino pueden considerarse unos simples tiros al aire, a ver qué pasaba.
Durante la siguiente década, entre las temporadas 2004-05 y 2013-14, los dirigentes de Ibaigane fueron muy activos en el mercado. Hasta 25 fichajes. Curiosamente, este periodo arrancó sin ningún movimiento -Valverde tiraba de canteranos, de los que sólo Iraola y Llorente triunfaron-, pero a raíz del bienio negro se multiplicaron las compras. Sólo entre 2006 y 2010, por ejemplo, se formalizaron 17. ¿Qué rendimiento tuvieron estas 25 incorporaciones. Pues bien, 13 de ellos jugaron más de 100 partidos y 6, más de 250. Nos referimos a Javi Martínez (251), Iraizoz (392), Balenziaga (321), De Marcos (500), San José (397) y Aduriz (407). Comenzaba a notarse en fin, que cada vez era más complicado contratar -o retenerlos si ya estaban en la plantilla y destacaban- a futbolistas que fueran a marcar una época en el club. Herrera, por ejemplo, se fue al Manchester United tras disputar solo 128 partidos.
Los tiempos estaban cambiando a peor para el Athletic, que cada vez lo tenía más difícil. Y esa tendencia negativa, lejos de detenerse, se ha ido agravando hasta llegar al momento actual, donde el papel del club en el mercado es poco menos que anecdótico y lo será todavía más con la entrada en juego de un nuevo factor desequilibran: Arabia Saudí. Entre las temporadas 2014-15 y la actual, la 2023-24, Ibaigane ha contratado a 16 futbolistas para el primer equipo. Las llegadas se han producido en este espacio de tiempo de forma muy irregular. En la campaña 2018-19, por ejemplo, llegaron 6 a la vez (Berchiche, Dani García, Kodro, Ibai Gómez, Ganea y Capa) y en las cinco siguientes -el dato no puede ser más elocuente- sólo han llegado 5 (Berenguer, Petxarroman, Herrera, Galarreta y Martón). ¿Cuál ha sido el resultado global de las incorporaciones? Pues bien, sólo 5 jugadores (Raúl García, Iñigo Martínez, Berchiche, Dani García y Berenguer), un 31% del total, han disputado más de 100 partidos. Y sólo uno, 'Rulo', ha traspasado la barrera de los 250 (340). Como también sólo uno -en este caso de los fichados en los últimos cinco años-, el recién llegado Ruiz de Galarreta, es hoy en día titular.
La conclusión salta a la vista: el mercado del Athletic es un pozo que se viene secando a lo largo del siglo XXI. Ya prácticamente no queda agua. Cada vez va a ser más habitual que el once rojiblanco se complete sólo con canteranos de Lezama. Lo fue el que ganó al Betis, por ejemplo. Y contra el Mallorca fueron diez, todos salvo Berchiche. Esto es algo de lo que, históricamente, se ha enorgullecido mucho la hinchada, pero ahora la lectura debe ser diferente, incluir un matiz que impida al menos echar cohetes. Ya no se trata de que los canteranos se impongan en el once por su brillantez y cierren el paso a los fichajes. Es que de fuera ya no les llega competencia.
Fichajes con más de 250 partidos en el Athletic
1992-93 a 2003-04 De los 19 futbolistas fichados en ese periodo sólo 9 llegaron a disputar más de 250 partidos de rojiblancos.
2004-05 a 2013-14 De los 25 fichajes en esa época, sólo fueron 6 los que jugaron más de 250 partidos.
2014-15 a 2023-24 El Athletic hizo 16 fichajes en esos años, 5 jugaron más de 100 partidos y sólo 1, Raúl García, ha superado los 250 encuentros (340).
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Noticias recomendadas
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.