El Athletic ha sido multado en cuatro de los cinco partidos en casa por cánticos e insultos

La primera amonestación de la LFP llegó al buzón de Ibiagane después del partido inaugural contra los 'merengues', en el que una parte de la grada increpó a Dani Carvajal mientras que los silbidos fueron generalizados. El enfado hundía sus raíces en la patada que le propinó el lateral a Yuri en la temporada anterior y que le rompió el peroné. El guipuzcoano tardó meses en recuperarse y volver a competir. San Mamés ni olvidó ni perdonó una durísima acción que se saldó con una amarilla. Más tarde, con motivo de la visita del Getafe, hubo otro informe de la Liga elevado a Antiviolencia por los «insultos a Bordalás y Greenwood». Los emisarios de la patronal de clubes recogieron en su escrito las «ofensas» proferidas contra el entrenador de los azules -«en tres ocasiones»- y el atacante inglés -acusado de violencia machista y posteriormente liberado de todos los cargos, retirados-, al que muchas gargantas dedicaron un sonoro «Greenwood muérete».

En agosto, a raíz del comunicado emitido por Iñigo Cabacas Herri Harmaila en el que denunciaba «represión, sanciones económicas» y avanzaba que no habría animación dirigida contra el Madrid (más adelante desconvocó la huelga), el Athletic respondió con otro texto en el que aclaraba los procederes disciplinarios -esta potestad recae en los comités de Disciplina y Apelación, dos órganos independientes integrados por socios- y detallaba las faltas documentadas de la temporada 2022-2023. Desveló que se produjeron «35 incidencias de las cuales 30 fueron amonestaciones escritas». De los otros cinco expedientes, uno fue archivado y cuatro derivaron en sanciones debido a la gravedad de su naturaleza. Un socio resultó expulsado y a tres se aplicaron suspensiones temporales. «Por esas conductas muy graves, el club fue sancionado», recordó el club, que en este inicio de la Liga ha seguido recibiendo multas.

Otra de las denuncias tiene que ver con el habitual cántico «españoles hijos de puta» que entona una pequeña parte de San Mamés. Suele repetirse y la LFP lo reflejó con motivo de la visita del Betis, entre otras. Vino de la grada de animación, en el que un grupo emitió el cántico que se encontró con la censura del resto del estadio. «Unos 1.000 aficionados, ubicados en los sectores 105 y 110 de la tribuna norte baja y situados junto a una pancarta con la inscripción Iñigo Cabacas Herri Harmaila, entonaron de forma coral y coordinada durante ocho segundos el cántico 'españoles hijos de puta'. Dicho cántico -precisó el informe- fue reprobado por otros aficionados locales mediante silbidos con la intención de que cesase». El texto también recogió que de esa misma zona se gritó «arriba, arriba, arriba con la Goma-2, que en Euskadi se prepara, que en Euskadi se prepara, pim, pam, pum, la revolución». Como en el caso anterior, los emisarios de la LFP acotaron que el resto del público mantuvo un «comportamiento adecuado».

En las reuniones con los compromisarios, el Athletic también trasladó que retirará la bonificación del 7% a los socios ubicados en los bloques próximos a la Grada Popular porque los bombos y el resto de los elementos de animación se han alejado y concentrado en la parte central de la tribuna.