El Athletic y Garitano quieren sellar su acuerdo antes de la vuelta a la competición

Las negociaciones con el entrenador avanzan rápido. Este periódico reveló el pasado 18 de mayo que el deriotarra había aceptado a sentarse en la mesa con la junta directiva, opción que rechazó el pasado invierno, y que el proceso de renovación de su contrato ya estaba en marcha. Apenas diez días después, las dos partes ven un acuerdo inminente, al punto de que comienzan a hablar de fechas para dar carpetazo a la cuestión.

El objetivo de los dos interlocutores ha sido llegar a un acuerdo rápido, lo que ha facilitado el entendimiento. La idea del Athletic es conocida desde hace tiempo. Su deseo es que Garitano continúe y encabece el proyecto deportivo de la temporada 2020-21. Aitor Elizegi, el presidente, pidió incluso que siga con él hasta el final de su mandato en 2022.

El entrenador ha sido más cauto. Ha optado por guardar silencio sobre sus planes de futuro, aunque su intención ha sido también cerrar un acuerdo. La junta se había propuesto sellar el trato en este mes de mayo. Si no lo logra, va a ser por unos pocos días.

Se trata del tercer plazo que se ha marcado Ibaigane para renovar a su entrenador. El primero fue en Navidades. Rafa Alkorta, director deportivo, se dirigió a Garitano para abrir las negociaciones con la llegada de 2020. Sin embargo, el entrenador le pidió tiempo. Quería centrarse en la Copa y esperar un poco porque no deseaba precipitarse en firmar y que luego un mal final de temporada debilitara su posición ante la opinión pública rojiblanca.

El segundo intento buscaba renovarle antes de la final de Copa, prevista inicialmente para el 18 de abril. Sin embargo, el coronavirus echó por tierra los planes y hubo que posponer de nuevo las conversaciones. Alkorta decidió entonces poner la cuestión encima de la mesa en cuanto se regresara a Lezama. Es lo que ha hecho.

Hay una cuestión importante a resolver, el tiempo de duración del contrato. A Aitor Elizegi le quedan poco más de dos años y medio de mandato. En varias ocasiones ha indicado que su gran deseo es que Garitano siga en el banquillo hasta la próxima cita con las urnas. Sin embargo, el entrenador se ha mostrado hasta el momento reticente a los acuerdos de larga duración. De hecho, la pasada campaña solo firmó por una campaña.