Un Athletic con dos caras es incapaz de mantener las ventajas

Valverde movió piezas para colocar al excentrocampista del PSG como su mediocentro organizador. Muniain se fue a la banda izquierda, donde jugaba hasta el pasado curso, pero en donde no había sido aún alineado en éste, y Sancet fue el mediopunta. La presencia de Herrera quitó a ambos protagonismo en el juego, sobre todo al capitán.

Fue la novedad más significativa en un once de Valverde en el que Berenguer fue el único titular al que se dio descanso. El otro cambio se produjo en defensa, pero era esperado. Yeray acabó lesionado el duelo del sábado ante el Atlético de Madrid y Vivian regresó a un once en el que no estaba desde el 11 de septiembre en Elche.

Ander Herrera firmó una genialidad con un pase picado desde el borde del área a Iñaki Williams. La respuesta del delantero fue también brillante, un gran control y un remate que dejó sin respuesta a David Soria. Gol a los 103 segundos, el más tempranero de la campaña para los rojiblancos.

Es la primera asistencia de Herrera y el premio a la determinación de ir a por el partido de los de Ernesto Valverde y la confirmación de que el Athletic es un equipo de primeras partes. Ninguno ha marcado tantos goles como los rojiblancos en la mitad inicial de los duelos. Con el de Williams son 12 sobre un total de 19. Es decir, casi dos de cada tres. Luego vino el primer bajón que permitió al Getafe empatar en el minuto 25.

IñakiWilliams se aupó a la primera posición de la tabla de goleadores rojiblancos. Lleva cuatro dianas en diez partidos. Es una media que le llevaría a acabar el curso con 15 tantos, una cifra considerable. Celebró su gol además en un día señalado para él porque se trataba de su partido 350. Ya se sabe que lo de Williams son los espacios y no las distancias cortas. Su estadística es la mejor prueba de ello. Casi el 60% de sus goles en Liga, 33 de 56 son como visitante.

Por detrás de Williams quedan en la tabla de goleadores Berenguer, Nico Williams y Sancet (3), Vesga y Guruzeta (2) y Raúl García (1).

La mejor noticia de la noche para Valverde fue la recuperación de Yuri Berchiche tras casi dos meses de baja por dolores en el talón de Aquiles. El lateral izquierdo sólo había jugado los dos primeros partidos de Liga y con su ausencia Valverde se quedó sin un defensa capaz de llegar hasta la línea de fondo. Sorprendentemente, el sustituido fue De Marcos, lo que llevó a Lekue a la izquierda.

Con su fútbol sin concesiones y bien servido de voluntad, el Getafe mandó en el partido a partir del primoroso arranque del Athletic. Con Muniain en la banda, los rojiblancos iban sin fe arriba. Y lo hacían pocas veces. La estadística de remates en el minuto 50 era de nueve para los locales por seis para los visitantes.

Valverde intervino. Ni siquiera esperó al cuarto de hora de la segunda parte, la frontera que marca que los cambios no generen sarpullidos. Salieron Berchiche por un De Marcos fallón, Berenguer por un Muniain lánguido y Raúl García por un Sancet extrañamente poco participativo. Un acierto. El movimiento colocó de nuevo por delante a los suyos.

El Athletic fue un equipo de dos caras y lo pagó. Brillante en el arranque y en los minutos posteriores a los tres cambios, pero con dudas que le costaron dos igualadas locales. En Getafe estuvo muy incómodo durante demasiado tiempo y eso que acabó la noche con una mínima ventaja sobre su rival en el número de remates, once de los locales por trece visitantes.