El día que Asier sentenció a Gaizka

El hecho es que el de este domingo solo será el tercer encuentro en el que coinciden ambos en los banquillos. Y eso como entrenadores, ya que en su etapa de futbolistas nunca coincidieron juntos en un campo de fútbol, pese a que en la etapa de Gaizka en el Bilbao Athletic y de Asier en el Eibar, sus equipos formaron un curso en la misma categoría y grupo.

Será el tercer partido y para Gaizka Garitano, la oportunidad de borrar el pasado ante un técnico con el que cuenta los enfrentamientos por derrotas y del que debe tener un mal recuerdo. Paradojas del destino en esta peculiar relación que mantienen los Garitano, el domingo se cumplen tres años exactos desde que se dieron la mano antes de un encuentro por vez primera. Fue también un 22 de septiembre, pero de 2016, cuando el Leganés de Asier visitó en Riazor al Deportivo de Gaizka. Era la primera temporada del club madrileño en la máxima categoría, pero en tierras gallegas no se notó, ya que fue el Leganés el que se llevó la victoria (1-2).

El duelo de vuelta fue mucho más doloroso para el actual entrenador del Athletic, un partido que a buen seguro no habrá olvidado. En plena segunda vuelta, las trayectorias de Leganés y Deportivo eran descendentes. Once encuentros sin ganar de los pepineros, por siete de los gallegos. Momento de urgencias que el Leganés supo sofocar con un 4-0 que colocó al Dépor en alerta máxima. De hecho, esta semana posterior los responsables del Deportivo decidieron cesar a Gaizka de sus funciones como entrenador. «Esta no es la imagen que tiene que ofrecer el equipo. Lo siento, no sólo por la derrota, sino por cómo se ha producido. Esto es perfectamente remontable, y lo vamos a conseguir», dijo el presidente Tino Fernández al anunciar su decisión.

Lo cierto es que Gaizka se marchó de Riazor tras ese encuentro con una discutible marca del peor porcentaje de victorias de un entrenador del Deportivo en Primera con más de 20 partidos dirigidos. El golpe que le propinó el Leganés de Asier dejó muy tocado al actual preparador del Athletic, que tras su salida encontró acomodo en Lezama. Gaizka reseteó para hacerse cargo de la formación de futbolistas rojiblancos en el Bilbao Athletic, y su buen hacer le sirvió para que las puertas del primer equipo se le abrieran el pasado curso tras la destitución de Eduardo Berizzo.

Asier también probó de la misma medicina que Gaizka tiempo después. Su exitosa trayectoria al frente del Leganés tuvo su punto final tras cinco temporadas en el club. El de Bergara decidió que su obra estaba concluida y que era el momento de buscar nuevos retos, que encontró con la oferta de la Real Sociedad para dirigir a los donostiarras la pasada temporada. Pero el cambio no le sentó bien. Sus planteamientos, su forma de entender el fútbol, no cuajaron en la formación txuri urdin y Asier fue relevado del banquillo a mitad de temporada.

La abrupta salida de Abelardo del Alavés abrió las puertas de Mendizorroza a Asier Garitano, que ahora busca que su estilo cuaje al frente de los albiazules, con los que ha sumado cinco puntos por el momento y la pasada jornada encajó ante el Sevilla la primera derrota de la temporada.

Este domingo, tres años después de la primera vez, los Garitano vuelven a tener una cita. Será en San Mamés, donde Asier certificó el pasado año la caída en desgracia de Berizzo -sería destituido la siguiente jornada- tras ganar 1-3 con la Real. Todo un peligro que Gaizka busca zanjar con su primer éxito.