El rojiblanco Adama pide «inhabilitar un tiempo» al rumano que lanzó el insulto racista a Gift

El lateral izquierdo llegó a Bilbao desde Osasuna B, después de que Ibaigane abonara los dos millones de euros que costaba su cláusula de rescisión. En Lezama ha indicado que él no ha sufrido insultos racistas en su trayectoria, pero lamentablemente «últimamente está habiendo muchos casos de racismo«, dijo. Como por ejemplo, prosiguió, «lo que sucedió el otro día en un partido de youtubers».

El jugador, criado en Pamplona, llama a la gente a «estar más involucrados» y a «sancionar de forma más dura estos casos«. »No depende de mí, pero sería la medida más sensata», añadió.

Gift fue atacado por un jugador rumano. Adama aclara que él no es quién para indicar qué castigo se debería llevar, pero «cuando digo que debería haber medidas más serias, digo que habría que inhabilitar al jugador durante un periodo de tiempo«, consideró. »Pero no es algo que me toque a mí».

La Federación Española reaccionó de inmediato al insulto. «Nuestro jugador Elijah Gift ha sufrido un incidente racista en el España-Rumanía», denunció antes de advertir que «condenamos enérgicamente cualquier tipo de actitudes discriminatorias en el mundo del fútbol y mandamos todo nuestro apoyo a Elijah». El Athletic también se sumó al apoyo al jugador. «Tolerancia cero al racismo. Zurekin gaude, Elijah!».

Lo ocurrido en el partido de la sub'19 en Rumanía es un nuevo episodio bochornoso de racismo en el fútbol. El pasado mes de septiembre, la Fiscalía de Madrid presentó una denuncia contra un ultra del Atlético de Madrid que lanzó insultos racistas a Nico Williams durante el partido que el Athletic jugó en el estadio Civitas Metropolitano el 27 de abril, según anucdió este órgano judicial. La denuncia señala que en el minuto 36 del encuentro, cuando el jugador del Athletic iba a sacar un córner, «con evidente desprecio al color negro de la piel de éste, escuchó los insultos de un varón escenificados con gestos de menosprecio de carácter racista».

Los gritos fueron «proferidos de forma repetida» y «consistieron en los sonidos 'uh, uh', uh', una onomatopeya que imita el sonido emitido por los monos y que como es público y notorio ha sido proferido en diversas ocasiones por grupos de aficionados de distintos países para ofender públicamente a deportistas por el color de su piel».

El club colchonero apartar «cautelarmente con carácter indefinido» al aficionado, que se alojaba en la granda donde se ubica el Frente Atlético. Además, el club fue sancionado con una multa de 20.000 euros y la clausura parcial de dos partidos de la zona donde se emitieron los gritos. La entidad presidida por Enrique Cerezo recurrió la pena.

No ha sido Nico el único de los Williams que ha sufrido este tipo de actitudes deleznables. Su hermano, Iñaki, fue víctima de insultos racistas cuando se retiraba por la banda tras ser sustituido en el encuentro que el equipo rojiblanco disputó el 25 de enero de 2020 contra el Espanyol. El hincha lanzó gritos contra el futbolista y «escenificó gestos de menosprecio de carácter racista hacia su persona». Al igual que le ocurriera a posteriori a Nico, el afeicionado en cuestión despidió al mayor de los Williams gritándole «Uh, uh, uh, uh», la onomatopeya que reproduce los sonidos emitidos por los monos.

El fiscal contra los delitos de odio de Barcelona pidió dos años de cárcel para el aficionado. Durante la instrucción, el propio jugador rojiblanco compareció en el juzgado para prestar declaración y ratificar los lamentables hechos de los que fue objeto.Fue la primera causa penal de la historia de España por racismo en un estadio de fútbol.