Comparseros se encaran con la Policía por retirar a los manteros de El Arenal

Una multitud, con una importante presencia de comparseros con camisetas identificativas, se ha encarado con la Policía Municipal por retirar a los manteros de El Arenal sobre las ocho y media de la tarde de este domingo, el último día de Aste Nagusia. Ante esta situación, los agentes decidieron pedir apoyo a la Ertzainza. Al menos, medio centenar de agentes han creado un cordón humano a la altura del puente para evitar el paso a las personas que les increpaban con pitos y al grito de «Fuera Policía de nuestros barrios». El despliegue se prolongó durante casi una hora.

La Brigada Móvil, la unidad de antidisturbios de la Ertzaintza, tuvo que acudir al lugar. Según informan fuentes municipales, no se han producido detenidos, aunque sí se ha identificado a una persona «por grabar» a los policías, negarse a identificarse e incitar a la gente para que se echaran encima de los agentes». Al parecer, era necesario despejar la zona para la celebración del toro de fuego y los actos de cierre de fiestas.

Según puede apreciarse en vídeos que circulan por las redes sociales, la intervención policial se ha producido a la altura de la churrería que se instala por Aste Nagusia, justo a la altura del cruce de peatones que une El Arenal con la explanada del Teatro Arriaga. Las imágenes muestran cómo los manteros se encaran con los agentes que les solicitaban que retiren la mercancia, una actividad que prohíbe la ordenanza municipal. También se producen varios empujones. A raíz de esa intervención, los comparseros han afeado a los agentes su comportamiento.

«En un momento dado, se han comenzado a enfrentar a los agentes y las personas que estaban alrededor han comenzado a acercarse, incluso a rodear a los policías», detallan fuentes del Ayuntamiento. Es entonces cuando se solicita unidades de apoyo «por seguridad». «Los agentes han realizado una línea y han ido retrocediendo poco a poco hacia la confluencia entre las calles Navarra y Bailén.

Justo antes del comienzo de la Aste Nagusia, el pasado miércoles 14 de agosto, un mantero fue detenido en El Arenal por encararse y agredir a un agente de Policía Municipal en Bilbao. El ataque se produjo cuando se le instaba a retirar la mercancía de su puesto de venta ambulante.

En aquella ocasión, una unidad de la Policía Municipal se percató de que unas quince personas se encontraban realizando venta ambulante. Cuando los agentes les pidieron que se retirasen, uno de ellos se negó. Con actitud violenta, se encaró y agredió a uno de los policías. El autor de los incidentes fue detenido acusado de un delito de atentado contra la autoridad.

En una entrevista concedida a EL CORREO, el alcalde de Bilbao, Juan Mari Aburto, trataba de apaciguar los ánimos tras la detención. «Son personas en una situación de vulnerabilidad, pero deben respetar la ley y a la Policía como todos los demás», señalaba. Sobre este arresto, preguntado por la actitud de la multitud que increpó a los agentes, defendió que «la Policía tuvo un comportamiento ejemplar».

«Es un mensaje de hipocresía social. Las encuestas nos dicen que la gente quiere más Policía en la calle, sentirse segura. Y luego está este caso concreto: la Policía pidió tres veces a los manteros que salieran del lugar y se llevasen los productos falsificados; hubo una persona que no accedió y agredió a un agente. Eso es algo que no se puede permitir», tachaba el regidor jeltzale.

Asimismo, señaló que «los manteros son personas vulnerables y sus intereses son diferentes a los de los comerciantes y a los de la ciudad». «Estamos trabajando con ellos, ha habido reuniones con su sindicato. Deben entender que han de respetar las normas, a la Policía. No hay que olvidar que son las mafias quienes manejan a los manteros, que venden productos falsificados, que cometen actuaciones delictivas», ha recordado. «¿Quiere la ciudadanía que no se actúe ante situaciones ilegales? No lo creo», se preguntó.

No es la primera vez que se registra una situación de estas características. La última tuvo lugar el pasado mes de abril, cuando manteros y algunos ciudadanos se enfrentaron a agentes de la Policía Municipal y la Ertzaintza cuando se disponía a incautar la mercancía que estaban vendiendo en la calle, junto a El Corte Inglés. El incidente alcanzó momentos de mucha tensión, con gritos, carreras y algunos porrazos, lo que provocó daños en el inmobiliario urbano.

Lo ocurrido recordó entonces otro suceso que tuvo lugar en agosto de 2023, en el mismo lugar, cuando una decena de ciudadanos supuestamente sensibles a la difícil situación de los vendedores ambulantes ilegales se enfrentaron a dos policías municipales que identificaban a un mantero. Entonces un agentes recibió una patada en la cabeza y acabó en el hospital.

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