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Falta poco más de una semana para que comience la Aste Nagusia y todo Bilbao se prepara ya para la fiesta. Los bares y hoteles ultiman sus terrazas, las barracas se instalan en el parque Etxebarria y, desde este miércoles, las comparsas comienzan su montaje ... en el Arenal. Les esperan diez días en los que trabajarán «sin descanso ni horario establecido» para tener las casetas preparadas para el momento en el que Marijaia salga por el balcón del Arriaga.
El trasiego de camiones de carga y descarga en el Arenal será constante durante los próximos diez días. En ellos se trasladarán unos 110.000 kilos de mecanotubo, el andamio que hace de esqueleto de las txosnas. Una vez este se haya montado, comenzarán a colocar los 1.500 paneles que componen la decoración. «Con ellos daremos forma a barras, cocinas y escenarios que harán gozar a todos los bilbaínos», han explicado esta mañana en rueda de prensa los portavoces de Bilboko Konpartsak, Aritz Zabala y Josu Fernández .
Aunque los paneles los reutilicen año tras año, la decoración nunca se repite. Es por ello que a los comparseros que les antoja fundamental pintar por encima de la ilustración de las fiestas pasadas. Para ello utilizan más de 1.000 litros de pintura. ¿Y qué dibujos nos esperan este año? Pues, de momento, mantienen la incógnita. «Habrá que esperar a la apertura de las txosnas». Lo que sí han dejado claro es que aprovecharán estos espacios para «dar a conocer las reivindicaciones de cada comparsa mediante mucha ironía e imaginación».
Si algo han querido enfatizar la rueda de prensa es que «las txosnas son el lugar en el que confluyen fuerzas y la aportación voluntaria de miles de personas». Calculan que serán unas 400 las que se impliquen en la construcción de las casetas de este año, aunque precisan que es un número complicado de calcular. «Somos entre cientos y miles. No lo podemos saber directamente porque somos voluntarios. Depende la comparsa y el día. Algunos días somos 10 y otros 35».
De esta manera, hacen un llamamiento a que «las gentes y grupos con espíritu voluntario y participativo tomen parten de las comparsas». Este año, de hecho, el recinto festivo del Arenal contará con una nueva txosna: Txinparta Konpartsa Feminista. Toma el relevo de Mamiki, que desapareció el año pasado, como el referente de este movimiento en la Aste Nagusia.
Los miembros de la federación festiva han aprovechado la rueda de prensa para insistir en el mensaje de que las txosnas sean «lugares seguros donde encontrar protección ante cualquier tipo de agresión machista, racista, homófoba, xenófoba o euskarófoba». En los próximos días, de hecho, se presentará el protocolo que han elaborado junto al Ayuntamiento para prevenir estas agresiones.
El Consistorio municipal, por su parte, ya ha hecho pública la campaña con la que pretende concienciar a la ciudadanía y reducir la agresiones. Bajo el lema 'Respeto Nagusia' busca un espacio festivo «para la igualdad, fundamental para prevenir, identificar y actuar frente a las violencias machistas».
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