Deportivo Alavés - Getafe

El tremendo cabreo de Bordalás al final del partido y el posterior portazo del árbitro

El primer episodio se produce al concluir el partido. José Bordalás enfila rápidamente el túnel de vestuarios y en el camino se cruza con un miembro del cuerpo técnico del Alavés, al que parece decirle algo por su reacción. «Bordalás se va sin despedirse, ¿no?», preguntan los comentaristas del partido, mientras las cámaras captan el momento. El míster del equipo madrileño se vuelve sobre sus pasos y varias personas tratan de mediar para impedir el «enganchón», como describen. Con el dedo índice en alto, José Bordalás señala directamente al miembro del cuerpo técnico del Alavés.

No terminó ahí la cosa. Ya dentro del túnel se vivió el segundo capítulo. Este no fue captado por las cámaras, sino que fue el propio Bordalás el que lo relató en la entrevista del postpartido. «El árbitro ha dado un portazo al final del partido. Ha dicho: 'Estoy hasta los huevos de aguantar a este equipo'», revelaba, según su versión, el técnico. «Imagínate si eso lo hubiera dicho cualquier jugador o técnico, nos habrían sancionado. ¿Ahora no hay sanción para los árbitros? No lo podemos entender», añadía, seriamente enfadado.

El origen de su enfado tenía que ver con el arbitraje del partido. «Siempre nos ocurre con este árbitro, no con ningún otro», apuntaba. Y posteriomente puso varias jugadas como ejemplo, como la entrada de Benavidez sobre Luis Milla. «Seguro que si hubiera sido a la inversa le hubieran expulsado. Qué esperamos, ¿que le parta la tibia y el peroné? Es una agresión clara. El VAR está para ello», concluía, sin morderse la lengua.