Rayos de luz entre la niebla

Está claro que al nuevo Alavés aún le faltan cosas. Bastantes. Y que le van a faltar tiempo y ensayos para llegar ajustado al inicio de Liga. Solo queda un amistoso, el del sábado en Zubieta, y varios aspectos por calibrar. El equipo albiazul empezará a competir sin los automatismos que ya tienen otros como el Huesca, Osasuna o el mismo Athletic, aunque trufara sus dos alineaciones de jugadores del filial. Pero el derbi de Lezama brindó algunos detalles ilusionantes. Más matices en la pizarra de Machín, con un equipo que, a la espera de los necesarios retoques que aún faltan por llegar, puede ser muy parecido al que estrene el campeonato ante el Betis.

El soriano volvió al 3-5-2 del primer día. Con Ely y Laguardia juntos por primera vez, fue el brasileño el que actuó en el centro de la zaga, donde no termina de encontrarse a gusto. Con el recién llegado Battaglia en el eje del centro del campo, escudado por Pina y Pere Pons como interiores móviles que por momentos le dieron al conjunto albiazul más control en el medio. Más cercano al pivote el manchego; mayor rango ofensivo para el catalán, muy activo en ambas partes del campo. Y presencia de las dos bandas: Edgar se consolida como el carrilero que no parecía ser y Rioja apareció más. En punta, Lucas y Joselu, la dupla titular, a priori, aunque ahora tienen la competencia del agitador Deyverson, al que le bastaron cinco minutos para presentar su candidatura con un gol.

El partido empezó movido. En apenas un minuto Joselu forzó un córner tras una conexión con Lucas. Y en cuatro Kodro remató alto un centro de Villalibre. Pero el Alavés tomó después el control. Bien en la presión, con posición adelantada de ambos interiores. Con criterio en la posesión, favorecido por apoyos más constantes; alternando la paciencia para llevar el balón a la banda y las apariciones entre líneas de Lucas, con libertad de movimientos, con el recurso del juego directo sobre Joselu.

Así generó varios acercamientos peligrosos al área rival, como la internada de Edgar a la espalda de la defensa tras una notable jugada combinativa que empezó desde atrás y, tras desfilar por varios jugadores albiazules, finalizó con un buen pase filtrado de Pina al canario. El selló de Machín. Sin demasiadas ocasiones nítidas, aunque Balenziaga tuvo que sacar bajo palos un tiro de Lucas tras una buena incorporación de Luis Rioja.

Carburaba el Alavés. 28 minutos buenos. Lo mejor de la pretemporada. Hasta que el colegiado quiso ver penalti a favor del Athletic en un forcejeo entre Pina y Luengo en un córner. Gol de Muniain. E impulso para el equipo rojiblanco, que poco después, pese a la rápida réplica de Joselu ante Ezkieta, aprovechó un garrafal error defensivo entre Ximo y Ely para aumentar la renta por mediación de Morcillo. El andaluz dio un mal pase atrás, el brasileño se durmió en la recepción y el 'cachorro' se quedó solo ante Sivera, al que batió tras regate.

Hubo tiempo para otro tímido disparo de Joselu, pero dos jugadas circunstanciales habían echado por tierra el buen trabajo previo de los vitorianos, que dominaron el juego pero fallaron en las áreas. Se rehicieron en la reanudación. Pronto, además, en apenas cinco minutos, con un buen gol de cabeza de Deyverson, que se adelantó a Paredes en un centro de Lucas. Y apunto estuvo el brasileño de cazar el empate en otro envío del gallego.

También lo rozó en una gran jugada personal Abdallahi, que está dejando claro que es una alternativa real, una interesante opción de futuro con cosas que decir en el presente. Ahí, con 25 minutos por delante, se empezó a diluir el duelo, entre el ritmo decreciente y el carrusel de cambios. Lo habitual de la pretemporada, que, al menos, empieza a filtrar algunos rayos de luz en la todavía lógica nebulosa albiazul.