La Diputación apoyará un nuevo proyecto «serio y razonable» para Mendizorroza

Y ésta es muy clara: «La Diputación siempre va a apoyar aquellas iniciativas que, surgidas desde el propio club, le permitan aspirar a infraestructuras de Primera. En este momento no hay un proyecto sobre la mesa, pero el Alavés sabe, y así se lo hemos trasladado en varias ocasiones, que un proyecto serio y razonable contará también con un apoyo razonable por parte de la Diputación, como creo que contará con el apoyo del conjunto de la sociedad alavesa», explica Ramiro González, quien desvela que «hace años» el grupo jeltzale ya respaldó «la construcción de un nuevo estadio» para el Deportivo Alavés.

El diputado general abre así la puerta a posibles alternativas más allá de meras obras parciales. «Si para abordar el mantenimiento del actual campo es necesaria una inversión muy importante, de muchos millones de euros, quizás sea tiempo de volver a plantear un proyecto de futuro. No sé cuál, pero realmente de futuro, que pueda durar décadas para que pueda jugar en ese campo un equipo de Primera División», precisa. Sin especificar si su apuesta pasaría por una propuesta similar a la ampliación y reforma que en su momento presentó el club albiazul o si se inclinaría más hacia la edificación de un nuevo estadio.

Se trataría de «racionalizar esa inversión y pensar ya realmente en el futuro desde el sentido común y la eficiencia económica». Una apuesta clara por un nuevo Mendizorroza, pero «no me corresponde a mí liderar un proyecto de esas características», asume Ramiro González. Consciente de que «corresponde al Ayuntamiento y al club solucionar esas discrepancias mediante el diálogo y el acuerdo».

Su postura contrasta con la que defiende el PNV en al Ayuntamiento. «El Alavés defiende legítimamente un interés privado y el informe técnico municipal, que admite el problema, defiende un interés público», exponía en ELCORREO Iñaki Gurtubai, cuarto teniente de alcalde, que anima a la directiva albiazul a ofrecer «una solución temporal» de la mano del consistorio mediante la entrega de «un proyecto de reparación» de los daños.

El Deportivo Alavés acepta que el Ayuntamiento no considere la cubierta como parte de la estructura de Mendizorroza, pero recurre al informe que encargó en julio para incidir en que sí es necesaria una intervención que compete al consistorio como dueño. Según ese estudio, las filtraciones de agua y la acumulación de sedimentos son las causantes de que las incansables goteras y éstas existen desde la gran reforma acometida en el estadio hace 25 años, en 1998, tras el ascenso del conjunto babazorro a Primera División.

Como telón de fondo, además, aparece la renovación del convenio por el uso de Mendizorroza. El actual acuerdo caduca esta misma temporada, en el mes de junio, y ambas partes asumen la necesidad de dialogar para renovarlo.