Villarreal-Alavés

Así fue el polémico penalti que sólo vio el árbitro y que acabó con la esperanza albiazul

Cuando el Alavés parecía que estaba más cerca de conseguir la igualada, todo intento se ha visto frenado en seco. Jarro de agua fría en forma de un penalti envuelto de nuevo en la polémica. Quintero González ha señalado el punto fatídico después de que el balón impactara en el brazo de Manu Sánchez, que se encontraba desequilibrado tras chocar con Yéremy Pino. Desde la sala VOR, tras revisar la acción, han reafirmado la decisión del colegiado. Una pena máxima que Dani Parejo ha transformado en el 2-0, alejando toda esparanza de puntuar en el Estadio de la Cerámica.

Minuto 79 y lo que en un prinicipio parecía un acercamiento sin demasiado peligro ha terminado por ser determinante. Ha cortado de raíz la reacción albiazul. Manu Sánchez y Yéremy Pino han saltado para disputar el balón que, tras golpear en un jugador, ha quedado muerto en el verde. Ambos han seguido tratando de dominar el esférico y es cuando el atacante 'amarillo' se ha caído en el área.

Es entonces cuando el árbitro ha señalado el punto de penalti. Pero no por esa caída, sino por una mano que había pasado desapercibida a primera vista. El balón golpea en el brazo de Manu Sánchez; sin embargo, los jugadores del Alavés han protestado la decisión argumentando que Yéremy Pino había empujado al lateral, desequilibrándole en el salto y propiciando que el balón le haya golpeado, a su juicio, de manera involuntaria en el brazo.

Cuando Quintero González se ha llevado el dedo al pinganillo todo hacía pensar que acudiría a la pantalla para revisar la acción . Y posiblemente rectificar su decisión. Sin embargo, toda esperanza se ha disipado cuando ha reafirmado la pena máxima. Los jugadores, tanto en el campo como en el banquillo, no han ocultado su enfado por el penalti señalado.

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