Pinceladas de versatilidad sobre una idea conocida en el Alavés

El ciudarrealeño traduce a palabras la idea futbolística que quiere imprimir Asier Garitano: «Defender juntos, eso en Primera es fundamental, verticalidad, intentar acabar jugadas, recuperar arriba, salir rápidos, ser intensos, ganar disputas y atacar rápido». Similar en conceptos básicos al libro de estilo de Abelardo, «pero con matices propios del míster». De momento, a la espera de completar el puzle de salidas y entradas, el guipuzcoano apuesta principalmente por un 4-4-2, pero más flexible que el del 'Pitu'. Con más variantes. La ubicación en banda de Javi Muñoz, que se mete al centro y deja el carril libre para el lateral, la posición adelantada de Manu García, el ensayo en Laguardia con un 4-3-3 versátil que derivó en un 4-2-3-1 con Jeando Fuchs como mediapunta...

A expensas de definir una defensa condicionada por la incertidumbre sobre el futuro de Maripán y la ausencia de Víctor Laguardia, que todavía no ha podido debutar por lesión, la pretemporada ya arroja algunas pinceladas a modo de conclusiones, instaladas aún en la provisionalidad del carácter amistoso de los partidos. La importancia en el centro de campo de Pina: calidad, pausa y jerarquía. La brújula de Pere Pons. La calidad de Aleix Vidal, el último en llegar, que en el amistoso de Laguardia demostró una gran capacidad de asociación y comprensión futbolística.

En punta, a la espera del deseado retorno de Calleri, Demirovic quiere vender caro su puesto a Lucas Pérez y Joselu, dos apuestas importantes del club que, a priori, parten por delante del bosnio, uno de los más destacados en el último amistoso. Y el único delantero que ha marcado en pretemporada, el primer gol, en el campo del Leioa. La puntería está siendo uno de los lunares del conjunto vitoriano, que solo suma seis dianas en cinco encuentros, uno de ellos en propia puerta. Los otros cuatro son obra de Manu García, Adrián Marín y Luis Rioja (2), máximo artillero estival.

«Nunca he sido muy goleador, lo que cuenta es la competición», dice el extremo izquierdo sevillano, que en Laguardia marcó de penalti. «He visto el balón cerca, tenía confianza y tomé la responsabilidad, yo no me escondo, me gusta sentirme importante. Si en Liga tengo que tirarlo, lo haré sin problemas», precisa. Su misión, a priori, pasa por «correr al espacio y ser vertical». Es lo que le pide Asier Garitano. Y el capitán: «He entrenado cerquita de Manu y me transmite que dé todo en potenciar mis cualidades, que corra al espacio y me deje de tonterías y de jugar en campo propio, que lo que vale dinero y marca diferencias es de tres cuartos para arriba. Y que esto es el Alavés, sufrir, cuando tengamos una meterla y volver a sufrir».

El desborde y desequilibrio mostrados la pasada temporada en el Almería, cualidades que le llevaron a fichar por el Alavés, solo han aparecido de manera intermitente. «Las piernas no están lo frescas que deberían y en la jornada 1 estaremos mejor para encarar y correr por fuera», apunta Rioja, que se perdió un partido, el del Albacete en la concentración segoviana, por un golpe en el tobillo. Quedan tres partidos, el del miércoles en La Romareda ante el Zaragoza y los dos que el conjunto albiazul disputará el sábado en Avilés, ante Sporting y Oviedo.