Fernando Ruiz de Esquide
Sábado, 15 de agosto 2015, 18:33
El Alavés ha cerrado la pretemporada en Aguilar de Campoo con una nueva derrota ante un equipo de Segunda B en un duelo plagado de despropósitos por parte de la escuadra albiazul. Dos graves errores defensivos le ha costado dos tantos ante el Burgos y ... la escuadra albiazul ha sido incapaz de reaccionar. En un duelo, además, donde el meta Fernando Pacheco ha sufrido problemas musculares y su sustituto Pau Torres, ha acabado expulsado después de cometer fallos importantes. El choque ha finalizado con el delantero David Torres como improvisado cancerbero alavesista en noventa minutos que solo han servido para acrecentar las dudas sobre el rendimiento de un equipo que lejos de ofrecer mejores sensaciones se ha hundido por errores poco habituales incluso en la pretemporada.
Publicidad
El partido ha comenzado con un Alavés situado bajo el dibujo 4-4-2, con David Torres y Toquero en punta. Una escuadra albiazul con las ausencias obligadas de Manu Barreiro, Juli, Pelegrín y Aritz Borda por problema físicos. Tras la derrota anterior en Tudela, la escuadra vitoriana ha salido hoy con más intensidad y orden, pero sin demasiadas ideas en ataque. Poco a poco se ha hecho con el control del balón y el dominio territorial, aunque solo ha inquietado en acciones aisladas. La más clara en una falta de Mora que Femenía ha devuelto al área pero no ha existido rematador. Una primera parte de cierta tranquilidad, con la excepción de los problemas musculares del meta Fernando Pacheco, que ha tenido que dejar su lugar a Pau Torres. También con el primer error grave del partido, que ha acabado en gol. Un balón en profundidad donde Einar y Pau Torres no se han entendido para dejar a Ander Vitoria meter el pie entre ambos para firmar el 0-1 a dos minutos del descanso.
Cuando el equipo albiazul trataba de reaccionar ha llegado otro fallo con poca explicación. Una cesión de cabeza de Laguardia que Fito ha aprovechado para adelantarse a Pau Torres y marcar con facilidad. Una segunda mitad donde el Alavés de nuevo ha amagado a balón parado en su única ocasión clara, con un cabezazo de David Torres al palo que Einar tampoco ha sido capaz de remachar. De ahí al final, un pobre espectáculo que ha dado para situaciones grotescas. Pau Torres no ha sido primero expulsado tras tocar un balón con la mano fuera del área, pero sí un minuto después al acumular la segunda amarilla por golpear con el brazo a un contrario. Con apenas un cuarto de hora para finalizar el duelo, solo ha habido lugar para algunas acciones duras y poco más en un partido ya desquiciado. No son los mejores augurios para preparar el inicio de temporada.
Accede todo un mes por solo 0,99€
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión
Te puede interesar
Publicidad
Utilizamos “cookies” propias y de terceros para elaborar información estadística y mostrarle publicidad, contenidos y servicios personalizados a través del análisis de su navegación.
Si continúa navegando acepta su uso. ¿Permites el uso de tus datos privados de navegación en este sitio web?. Más información y cambio de configuración.