Manu García: «Es un buen momento para salir de la zona de confort»

De camino al hotel donde se alojan hasta dar con la vivienda familiar, Manu García atendió la llamada de EL CORREO para contar sus primeras sensaciones. Está contento con la experiencia que tiene por delante; una cultura diferente, distinto idioma y otro fútbol. Entre las propuestas que recibió y el interés que un par de clubes de Primera mostraron por él, se decantó por la entidad chipriota, tal y como avanzó este periódico el día 5. «Mi idea inicial era bastante diferente, aunque estaba abierto a salir fuera de España como opción vital. Durante estas últimas semanas me he dado cuenta de que con el límite salarial y la situación de los clubes el tema no iba a ser tan fácil como otros veranos. Surgió esta posibilidad y las cosas se fueron valorando poco a poco hasta que nos decidimos por el Aris Limassol, porque es algo que nos satisface a nivel profesional y familiar», reconoce el excapitán del Deportivo Alavés.

En cierta forma pretendía alejarse del día a día de Vitoria para que no se asociara su nombre en un sentido u otro al devenir cercano de la escuadra albiazul. «Había que pasar el duelo de alguna manera y creemos que es un buen momento para cambiar de aires. Salir de la zona de confort nos va a permitir evolucionar. Vayan bien las cosas o mal, que ojalá sean buenas, siempre iba a haber relación con Manu y el Alavés», cuenta el centrocampista, quien ha sufrido más que nadie lo acontecido estas temporadas anteriores con la permanencia apurada. Contaba con el interés real de dos equipos de la Liga Santander, aunque le pedían unos días más hasta poder concretarlo en una propuesta. El tiempo iba pasando y él mientras reunía información de lo que podía ser su nuevo destino. Se ha informado por antiguos compañeros de cómo es todo aquello. Ha firmado por un año con opción a otro. «A través de Aritz Borda empecé a conocer esta competición. Mikel González, que lleva cuatro años en Larnaca, también me ha contado cosas buenas, tanto de la liga como de su organización. El Apoel era el conjunto más potente de la capital, pero las cosas han ido cambiando. El Aris Limassol quiere crecer y de la mano de un nuevo inversor, lograr cosas a nivel nacional sin descartar la opción de jugar en Europa», desgrana el futbolista, de 35 años.

Será el único español de una plantilla formada por jugadores de muchos países, con lo que el inglés será el idioma dominante. «Para mí ese ha sido también un punto a favor. Me defiendo y puedo hablar bien. Me servirá para afianzarlo. En el equipo hay tres compañeros que han jugado en España y hablan muy bien el castellano. No va a haber ningún problema en ese sentido», avanza.

Como tampoco en encontrar pronto el punto de forma idóneo para estrenarse en la competición el día 21, que es cuando arrancará la temporada en Chipre. «Quiero disfrutar del fútbol sin la presión que he tenido en Vitoria. Físicamente estoy bien, porque he llevado a cabo una serie de entrenamientos de manera individual gracias a Neno. Me falta un poco de campo y estar con los compañeros, pero pronto estaré en condiciones. Echaba en falta la rutina diaria de los entrenamientos», apunta Manu García.