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c. P. De A.
Viernes, 17 de julio 2020, 00:23
La satisfacción casi plena. Juan Manuel López Muñiz solo echó en falta el abrazo de su esposa y sus hijas al final del partido. El núcleo familiar que le acompañó a Vitoria en su aventura exprés como entrenador del Alavés sufrió desde la distancia ... hasta la liberación final en el Benito Villamarín. «Ellas vinieron conmigo a Vitoria y fueron quince días duros. La pena es que no estén aquí», confesó el técnico tras el encuentro. Después de tanta angustia, el pitido final dictó la sentencia favorable para el Alavés. «Queríamos lograr el objetivo ganando, sin depender de otros resultados», subrayó el asturiano. Dos semanas de tensión continua y una alegría final para quien llegó como reactivo de un plantel desconectado y que desde el primer día se encontró «una predisposición absoluta y un club familiar». «Ver llorar a Manu sobre el césped después de lograr el objetivo dice mucho del grupo que tenemos. He disfrutado mucho entrenando a esta plantilla», reconoció al preparador albiazul.
Salvación certificada después de un partido «duro e intenso». López Muniz vio un encuentro «controlado» a pesar de que en la primera parte el Betis fue dueño de la posesión y generó cierta desazón en las filas vitorianas. El entrenador gijonés reconoció que los hombres de refresco que irrumpieron en la segunda mitad ayudaron a un Alavés «con experiencia, tablas y una capacidad de sufrimiento importante».
«Fue una gran segunda parte. Vi a un equipo con personalidad y eso te da calma. Intenté que entendieran que no podíamos especular ni esperar a la última jornada para salvarnos. Solo nos valía ganar», explicó López Muñiz.
El Alavés se vino arriba «con más claridad con el balón» y los goles de Joselu y Rodrigo Ely abrieron el cielo. Ya en el descuento, el tanto bético apenas supuso un nubarrón de paso fugaz. «El equipo no tuvo miedo en esos últimos cinco minutos», se congratuló el técnico, que recordó que «viene aquí para quince días y nada más», sin dar más pistas sobre una posible continuidad.
Autor del primer tanto albiazul, Joselu dejó una rúbrica positiva a semanas de turbulencias en las que «hemos tenido muchos altibajos y en las últimas semanas ha pasado de todo en el club». Reconoció que la llegada de López Muñiz otorgó la «viveza» que necesitaba el equipo pero mandó un mensaje de agradecimiento «a Garitano y a su cuerpo técnico».
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