El club prescinde de López Muñiz tras cuatro partidos y busca ya un sustituto

Su salida parecía probable. El asturiano ha sido un buen recurso, valorado de forma positiva por todos, aunque no era la primera opción del club para su quinto proyecto en Primera. De ahí, entre otros motivos, que no existiera una cláusula en su contrato que le permitiese seguir en el banquillo vitoriano. Él mismo asumió tras lograr el objetivo que no dependía de él seguir en el Alavés. «Vine pensando que eran quince días. No quiero pensar más», explicó.

Con una victoria, un empate y dos derrotas ante gigantes como el Real Madrid y el Barcelona, Muñiz se va reforzado de Vitoria. Llegó junto a sus dos asistentes técnicos, Álvaro Reina y Toni Mengual, sin mucho que ganar, con el equipo ubicado fuera de descenso , aunque ha logrado reflotar el ánimo del vestuario y, sobre todo, sumar los puntos necesarios para lograr la permanencia. Ha cumplido, y ese ha sido su mejor aval para volver a colocarse en el banquillo. Además, se ha confirmado como un técnico motivador, aunque no haya conseguido en apenas un puñado de entrenamientos solventar algunos de los debes albiazules. Ahora espera destino y la Segunda división se antoja como su escaparate más probable. Ahí, en el Málaga, es donde había entrenado antes de pasar un año en blanco y llegar al Alavés.

Tras anunciar su salida, es el turno del Alavés para mover ficha y encontrar una nueva cabeza visible de su proyecto. A la directiva y dirección deportiva le toca el reto de encontrar al entrenador nada menos que para una fecha tan señalada como el centenario del club. Un año especial en el que la afición quiere desterrar el sufrimiento que ha vivido en las últimas jornadas.

A partir de ahí, le tocará rearmar al equipo para que recupere su competitividad. Tendrá 32 jugadores a su disposición, entre los que tienen contrato de la temporada, futbolistas cedidos y jugadores del filial. También deberá incorporar -siempre en colaboración con el departamento encabezado por Sergio Fernández- los refuerzos necesarios para una plantilla que este año ha pecado de falta de claridad en el centro del campo y escasa profundidad en las bandas.

Al que llegue le tocará afrontar, además, un calendario más congestionado. Todavía no hay fecha oficial para el comienzo de la temporada, aunque la intención de la Liga es hacerlo el fin de semana del 12 y 13 de septiembre. Es decir, dentro de poco más de mes y medio. En ese tiempo los jugadores deberán disfrutar de sus vacaciones, iniciar la pretemporada y disputar los clásicos amistosos.

El nuevo entrenador albiazul será el séptimo del club desde su regreso a Primera en el verano de 2016. El octavo, si se cuenta la doble interinidad de Javier Cabello. Además, será el quinto entrenador diferente que empieza la pretemporada. Es decir, uno diferente cada año. Le toca al Alavés acertar para lograr una estabilidad que todavía no ha encontrado.