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Después de una pésima campaña anterior, John Guidetti tampoco acaba de arrancar este ejercicio. El leve repunte del delantero con su estreno en San Sebastián y la titularidad posterior en el Mallorca tampoco le ha dado para meter la cabeza en la alineación de ... Suecia. Ni siquiera para disfrutar de unos minutos ante la débil Malta, a la que el conjunto escandinavo apabulló en la noche del sábado a domicilio (0-4). Su última oportunidad, con el combinado sueco jugándose sus opciones de acudir a la Eurocopa de 2020, llegará en el choque de mañana ante España.
Parece claro que el veterano seleccionador Janne Andersson tiene prioridades entre las que no se encuentra el jugador alavesista. En un equipo sueco que formó en ataque con Quaison (Mainz 05, Alemania) y el veterano Berg (Krasnodar). Ambos fueron reemplazados durante el duelo ante Malta, pero sus sustitutos fueron el jugador de la Real Sociedad Isak y Sebastian Andersson, que milita en el Unión Berlín. En definitiva, ahora mismo es la quinta pieza del ataque escandinavo.
Algo que también quedó claro en la anterior citación de Suecia, cuando Guidetti acumuló otros dos partidos sin pisar el césped. Curiosamente, en aquella oportunidad el técnico le convocó cuando el delantero alavesista acumulaba tres jornadas iniciales de la competición sin disputar minutos. La última de ellas, frente al Getafe, sin siquiera entrar en la lista de convocados.
No parece que Guidetti lo vaya a tener sencillo a partir de ahora en el Alavés, aunque el cambio de sistema y ese 4-4-2 que puede ser la constante a partir de ahora, abre algún hueco. Más allá de que la pareja de ataque inicial vaya a ser formada por Lucas Pérez y Joselu, el equipo alavesista tampoco cuenta con muchas más piezas de ataque.
En Valencia Asier Garitano prefirió a Borja y Burke para las sustituciones ofensivas. El escocés, incluso, como suele ser habitual en su selección, puede jugar de ariete puro. No obstante, la función de Guidetti entre líneas, como sucedió en Mendizorroza en el partido ante el Mallorca, no tiene clon dentro de la plantilla que maneja el técnico guipuzcoano. Quizás sea su única esperanza, además de posibles lesiones, para hacerse un hueco este ejercicio en el Alavés. Lejos queda aquella primera campaña, tras su llegada como cedido desde el Celta, donde cuajó una pareja importante con Munir para tirar de un equipo que se recompuso después de un nefasto arranque liguero.
El club vitoriano sigue pendiente también de Oliver Burke, que como anunció su entrenador el sábado, no formó parte de la convocatoria del conjunto escocés en el choque internacional ante San Marino. El escocés sufrió una aparatosa caída con un fuerte golpe en los riñones que le obligó a dejar el partido ante Rusia en el descanso. El Alavés recibió noticias tranquilizadoras sobre su estado físico, pero también se encuentra pendiente de que sus servicios médicos evalúen si el extremo británico puede entrenar con normalidad esta semana.
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