Cuatro intermitentes candidatos para completar el engranaje ofensivo albiazul

La única nota discordante es el ala izquierda del ataque albiazul. De las cuatro plazas ofensivas, tres se han ganado un dueño indiscutible. La pareja Lucas-Joselu ha logrado que sus goles sean el mejor aval. Son ya 15 entre ambos, la segunda pareja de La Liga que más convierte tras la formada por Messi y Suárez (21). Aleix Vidal, que poco a poco encuentra su juego y que aspira a ser una pieza fundamental, también es titular. Aunque ha jugado algunos minutos por dentro e incluso por la izquierda, su banda es la diestra.

El teórico inquilino de la contraria, en ese once ideal que los ilusionados aficionados esbozaban en verano, es Luis Rioja. Fue la primera inversión para el carril. Se apostaba por él, un jugador debutante en Primera, para mantener viva la llama de Jony. Un futbolista de un perfil diferente; aunque, como el asturiano, un extremo puro, de los que juegan pegado a la línea de cal. De desborde y descaro. Pero todavía no ha encontrado su hueco en la élite. Suele ser la primera opción para Garitano, pero le falta ese punto de chispa para atreverse a todo.

Si no juega él, lo hace Oliver Burke. Aunque su rol es más cercano al de revulsivo para las segundas partes que el de un jugador titular. Cuando Garitano ha optado por alinearle de inicio lo ha colocado, por normal general, en la banda izquierda. Puede desenvolverse en la zurda, pero donde mejor explota sus virtudes es en la banda natural, en la derecha. Ahí es donde puede aprovechar su velocidad y potencia, además de su disparo. Cuando lo hace en la izquierda queda limitado por su menor habilidad con la zurda y sus carencias técnicas y tácticas.

Si no son ellos, el que asoma la cabeza es Borja Sainz. El vizcaíno, todavía en edad juvenil, ha sido la sorpresa de esta temporada. Aunque todavía su entrada es paulatina y pocas conclusiones se pueden sacar de su juego. Cuando ha jugado, tanto en una banda como en la otra, ha mostrado desparpajo y descaro. Aunque más cuando sale desde el banquillo que cuando actúa de inicio. El rol de Burgui, recién recuperado de una grave lesión, no ha sido más que testimonial. Su peso se reduce a cuatro minutos contra el Valladolid.

La plantilla entrenó este sábado, un día después de sumar un empate contra el Leganés que deja un sabor agridulce. Aunque el punto, por la forma en que llegó, no es un mal botín. Todos, salvo el lesionado Pina, saltaron ayer al césped de Ibaia. Aunque los titulares contra lo pepineros lo hicieron con menor carga de trabajo que sus compañeros. Aunque sin tiempo que perder para preparar un nuevo reto, este martes contra el Jaén en Copa del Rey (19 horas). Hoy volverán a entrenar en la Ciudad Deportiva.

La del torneo del k.o. será una buena oportunidad para que esos teóricos suplentes intenten ganarse un hueco. Garitano introducirá varias rotaciones. En un partido en el que el Alavés debe ser superior y generar peligro, la aportación de los carriles puede ser, de nuevo, crucial.