Quedan cuatro días de mercado invernal. En la medianoche del viernes bajará la persiana este complejo bazar futbolístico que tantos quebaderos de cabeza da en los despachos de los clubes. Sobre todo en los que, como el Deportivo Alavés, no han conseguido encontrar la regularidad ... en la primera vuelta del campeonato. El equipo albiazul recuperó la ilusión en el campo del Levante (0-1), pero regresó a su habitual estado de inquietud con la derrota ante el Villarreal (1-2). No fue una mala actuación de los de Garitano, pero concedieron demasiado, con dos errores propios como germen de los dos goles amarillos. Falta el equilibrio que busca el club en la recta final del mercado, donde, ras reclutar a Camarasa, Ismael y Roberto, busca, al menos, un mediocentro y un delantero.
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En el eje el deseado es Ljubomir Fejsa, centrocampista del Benfica, aunque su incorporación está costando. Continúa el tira y afloja entre los clubes. El vitoriano insiste en la vía de la cesión; el lisboeta prefiere finiquitar el vínculo con el jugador, un internacional serbio de 31 años que esta temporada, mediatizado por las lesiones, ha perdido protagonismo en el equipo de Bruno Lage. Es el pivote defensivo que quiere Garitano para ocupar el puesto del lesionado Tomás Pina, el encargado de nivelar el juego albiazul en el círculo central.
Sin minutos
La otra necesidad está en la punta de ataque, donde, tras la salida de Guidetti, solo están los indiscutibles Lucas y Joselu. Con un extraordinario rendimiento ambos, pero sin relevos naturales en la plantilla. Y el de Silleda está apercibido de sanción. Un mercado muy complicado, el de los delanteros, que condiciona muchos movimientos en Primera. El Barcelona necesita uno y piensa en Rodrigo, del Valencia, que ya diseña un 'plan B' –puede salir cedido el exalbiazul Sobrino–. También persiguen refuerzos en esa zona Villarreal, Leganés y Osasuna, tras la lesión de Chimy Ávila, y la Real Sociedad asiste paciente al desenlace del interés del Tottenham por Willian José. Cualquier movimiento oficial puede desencadenar un 'efecto dominó' en el que la ficha de Lucas Pérez también está sobre el tablero.
Muchos condicionantes. También en la puerta de salida. El Alavés no descarta la llegada de un extremo izquierdo, pero esta opción no está entre las prioridades y se debe ver facilitada por la partida de algunos jugadores residuales como Javi Muñoz, Dani Torres, Rafa Navarro... Se buscan destinos para futbolistas que no entran en los planes de Garitano. Como sucedió en verano con Jeando Fuchs, cedido al Maccabi Haifa. Un préstamo poco fructífero –147 minutos repartidos en seis partidos– que ambos clubes han decidido cortar. El centrocampista franco-camerunés ya no está ligado al equipo israelí y jugará la segunda parte de la temporada en la Liga francesa, cedido de nuevo por el Alavés, donde tiene contrato hasta 2023.
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