Mendizorroza recupera su histórico marcador por el centenario

Además de los habituales videomarcadores, funciona también una réplica del histórico. Por ello, los goles que pueda haber durante el partido se anotarán de manera manual gracias a las tablillas de números del viejo marcador.

Se trata de un guiño más a la historia del Glorioso, después de conocerse que Javier Berasaluce, de 90 años, será el encargado de efectuar el saque de honor antes del comienzo del encuentro.

La réplica del antiguo marcador medirá 4 metros de ancho y 3,5 de alto. Estará ubicado -solamente en este partido- y en la grada de Preferente, en una zona cercana a Polideportivo.

Durante el año del Centenario irá de ruta por varias localidades del territorio para que los ciudadanos lo puedan ver de cerca, dentro de la filosofía de acercar el Deportivo Alavés a todo el Territorio. «La ausencia de público en este encuentro, nos anima a acercar una de las herramientas históricas del Alavés para que pueda verse en directo y guardar recuerdos fotográficos», explicó el club, que pronto dará a conocer las localidades por las que pasará el viejo marcador de Mendizorroza.

Donato Díaz Villaluenga fue conocido en Mendizorroza como 'el hombre del marcador'. En la temporada 1945-46 se estrenó en las funciones que heredó de su padre en un primer partido entre el Deportivo Alavés y la Gimnástica Burgalesa, en su atalaya situada entre las gradas de General y Polideportivo.

Donato se encargó durante medio siglo de subir al casillero los goles albiazules pese al frío, la lluvia y la inestabilidad de las gradas, y vivió tanto los tiempos en Regional como todos sus ascensos hasta alcanzar la Primera División.

Ante la llegada de los marcadores electrónicos a Mendizorroza, Donato se jubiló a los 82 años y fue condecorado con la insignia de oro y brillantes del Deportivo Alavés. El 16 de junio de 1998, con la remodelación de Mendizorroza para ajustarse a los requisitos de la Primera División, tras conseguir el ascenso, el viejo marcador fue derribado por las excavadoras de la grada de General donde se encontraba. En el reformado estadio no hubo espacio para él.