Borrar
Un lance del partido ente el Levante y el Alavés.

Ver fotos

Un lance del partido ente el Levante y el Alavés. Jesús Andrade
Deportivo Alavés

Los caprichos de la pizarra

El Alavés gana algo de frescura y fluidez al cambiar su dibujo, pero cede el empate en la estrategia en la primera prueba con fuego real

Iñigo Crespo

Domingo, 6 de agosto 2017

Algo no iba bien hasta ayer en el Alavés, que todavía no había logrado convencer a sus aficionados en sus cinco primeras pruebas de pretemporada. El conjunto albiazul pedía a gritos un cambio de cara y esta llegó de la forma más contundente, con un nuevo precedente en el libro de tácticas y la chispa que le imprimió el canterano Víctor López en la jugada del gol. Luis Zubeldía modificó su esquema para introducir a dos puntas, y lo cierto es que el equipo vitoriano firmó sus mejores minutos del verano en la primera prueba con fuego real, ante un adversario de su talla y a menos de dos semanas del inicio de Liga.

Levante

Oier, Moore, Rober Pier, Chema R., Luna, Verza (Postigo, min. 78), Campaña (Doukouré,min.71), Bardhi (Toño, min.60), Morales, Jason (Lerma, min. 46) y Alegría (Iván López, min. 60).

1

-

1

Deportivo Alavés

Pacheco, Vigaray (Víctor López, min. 59), Alexis, Ely (Maripán, min. 78), Duarte, Torres, Krsticic (Wakaso, min. 71), Burgui (Romero, min. 59), Ibai (Pedraza, min. 72), Sobrino (Enzo, min. 71) y Santos (Demirovic, min. 87).

  • Goles 0-1. M. 64. Sobrino; 1-1. M. 70.Lerma.

  • Árbitro Mateu Lahoz. Mostró tarjeta amarilla a Krsticic y Torres por el Alavés y a Verza por el Levante.

El técnico argentino quería evitar atascos prolongados en el centro del campo y acabar con el síndrome del ariete solitario de sus puntas. Sobrino y Santos partieron de inicio en la prueba más significativa que ha deparado el laboratorio albiazul, con buenos resultados durante la primera media hora de juego. El Alavés ganó algo de frescura y fluidez en su fútbol, que huyó del apagón en que se había convertido su faceta creativa. A falta de que llegue el ansiado cerebro antes del 18 de agosto, Zubeldía estiró su pizarra inclinar la balanza de la manera más pragmática posible.

Pero más allá de esos avances a la hora de generar peligro, al Alavés aún le costaba un mundo realizar algún disparo a puerta, por tímido que fuera. Es cierto que Santos y Sobrino se entendieron de forma prometedora en sus movimientos y que Burgui no dudaba al encarar a sus adversarios. De hecho, el acercamiento más llamativo de los albiazules no llegó hasta el minuto 28, cuando el extremeño se topó con Oier en un disparo cruzado. Para entonces, el Levante, más sumiso desde el arranque, ya había estrellado la pelota en el palo por medio de Morales.

La tropa de Zubeldía se encogió tras el susto granota. Krsticic desapareció en la creación, a Torres le costó encontrar socios cuando no se coordinaba con el serbio, y a los laterales les faltó ofrecer algo de profundidad para acompañar a Ibai y Burgui en las subidas. El levantinista Jason, de hecho, gozó de la oportunidad más clara en el tiempo de descuento del primer tiempo, cuando trató de ajustar demasiado ante la salida de Pacheco. El atacante, de hecho, tuvo que ser sustituido tras el descanso.

Revulsivo urgente

El conjunto albiazul necesitaba un revulsivo con urgencia. Lo intentó con Óscar Romero, el jugador más incisivo durante la media hora que permaneció sobre el césped. El paraguayo, que parece decidido a hacerse un hueco en la plantilla de Zubeldía hasta diciembre e incluso de convencer al club de ampliar su préstamo, protagonizó los centros más medidos, buscó la pelota con insistencia al incorporarse al centro del campo... Sin embargo, el destello más sorprendente llegó de las botas del canterano Víctor López, quien sustituyó a Vigaray a falta de que se concrete un fichaje para el lateral derecho. Tras un brillante recorte, puso la pelota en la cabeza de Santos, quien puso en bandeja la primera diana a Sobrino.

Parecía que la prueba del algodón saldría favorable al Alavés, que al fin se puso por delante en el marcador del Martínez Valero. La pizarra dio un necesario espaldarazo a los hombres de Zubeldía, inmersos en un mar de dudas tras el empate ante el Numancia y la derrota contra el Trabzonspor. Sin embargo, fue la misma estrategia la que le arrebató ese triunfo que debía servir de base para la recta final de la pretemporada, cuando Lemar remató con certeza un servicio a la salida de un córner.

No se rindió el Alavés, que persiguió el triunfo en el último cuarto de hora. El equipo albiazul estuvo lejos de convertirse en un torbellino de juego, pero rozó la victoria en un cabezazo de Alexis. El central malagueño se encontró con una mano prodigiosa de Oier al cabecear un gran envío de Romero. Los hombres de Zubeldía comienzan a carburar a menos de dos semanas del inicio de Liga ante el Leganés en Butarque. Al menos, el técnico argentino encontró algunas soluciones a falta del póquer de fichajes que todavía se espera en las oficinas de Mendizorroza.

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

elcorreo Los caprichos de la pizarra