Cambiar de cara con la misma idea

Esa es la clave, el conjunto albiazul compite atrás y se desvanece adelante. Al técnico de Bergara no le sorprende. «Estaba convencido de que defensivamente íbamos a estar ordenados porque, además de tener talento para ello, había un bloque de años anteriores. Ofensivamente sabía que nos iba a costar, porque es lo más difícil y porque hay varios jugadores nuevos y cuesta más conocer los automatismos». Por eso no está nervioso, asegura. Porque, a 26 de septiembre y en puertas de la sexta jornada liguera, el vitoriano es todavía, a juicio de su entrenador, un equipo en construcción.

«Estamos en ese proceso. Llevamos dos meses y pico con bastantes cambios, nos ha variado la configuración de cómo habíamos hecho idea de llegar al 31 de agosto, gente que no creíamos que estarían están...», reflexiona Garitano. En resumen, «tenemos un buen grupo, trabajador y noble, pero necesitamos hacer un buen equipo». Así, aún entre hilvanes y con la espada de Damocles del tiempo encima, llega el Alavés al Reale Arena (21.00 horas), donde se esperan cambios.

Rotaciones y oportunidades. En la búsqueda de ese crecimiento «tenemos que dar opciones a jugadores, mirando no solo al partido, sino hacia dónde tiene que ir este equipo para poder competir y conseguir el objetivo de salvarse». Espacio, a priori, para los Lucas Pérez, Pere Pons, el inédito Magallán o el todavía incierto Burke. El once es una incógnita. La idea, no tanto. El cambio matizado de nombres no conllevará un cambio de estilo, admite Garitano, que espera el mismo guión que marcaron los dos amistoso ante los realistas, en Zubieta (1-0) y en Tafalla (0-0, donde el balón y el espacio fueron para los 'txuri-urdin' mientras los albiazules, como viene siendo habitual, esperaban su oportunidad a la contra. «Es posible, sí», asume el técnico alavesista.

«No creo que sea un tema de dibujo, sino de estar más acertados con balón», apostilla. Es cuestión de precisión, por tanto, pero el plan inicial, como en Getafe o Bilbao, pasa por aguantar las embestidas rivales y ser «capaces de dar ese pase» que permita diseñar alguna opción ofensiva. Dicho de otra manera, «hay que estar preparados para sufrir, tener humildad, pero también la ambición de poder hacer daño».

Nada nuevo. Solo cambia el rival, una Real Sociedad que «genera mucho y tiene mucho talento». Que está sometiendo a los rivales. «Va a dominar al 80% de los equipos de Primera», asume Garitano, que tiene claro que el Alavés no está entre el 20% restante. Es consciente de la calidad de jugadores como Oyarzabal, Merino, Odegaard, Portu o Willian José, aunque no todos partan hoy de inicio, pero le preocupa más «dar una mejor versión» propia. «Lo importante es que seas reconocible, saber sufrir sin balón, tener personalidad para hacer daño... Si no eres capaz de sacar tu mejor versión, no vas a tener opciones».