El calendario examina la solvencia de un plantel que espera refuerzos

Faltan carrileros. Ahí entra en escena el uruguayo Guillermo Varela, lateral derecho del Copenhague, que puede ser el próximo en llegar. También algún centrocampista. Hasta el punto de que, con Tomás Pina de baja –ya trota sobre el césped de Ibaia– y Manu García sin el ritmo necesario tras lesión, el técnico soriano tuvo que cambiar de dibujo táctico porque solo tenía dos jugadores del primer equipo disponibles en esa posición, Battaglia y Pons, con Abdallahi, Sergi García y Pepe Blanco como alternativas del filial.

El capitán ya tuvo minutos ante el Getafe –salió en el 80– y cobrará protagonismo en una secuencia de tres partidos en nueve días. El miércoles espera el Villarreal en La Cerámica y el domingo visita Mendizorroza el Athletic. Es pronto para hablar de dosificar esfuerzos, sobre todo habiendo después un parón liguero, pero sí para empezar a gestionarlos. Reintegrar a Lucas, frenado por una sobrecarga, en una delantera donde Deyverson ha elevado la competencia; probar la opción del aún inédito Adrián Marín... Mover un árbol que a día de hoy no tiene demasiadas ramas.

Machín, eso sí, ya ha utilizado 21 piezas en tres jornadas ligueras. El último en aparecer fue Manu y del primer equipo solo faltan por hacerlo Sivera, Tachi y el mencionado Marín, puesto que Burgui, Rafa Navarro, Fuchs y Saúl están, con más o menos opciones, en la rampa de salida. Cuatro futbolistas han disputado los 270 minutos –Pacheco, Laguardia, Pere Pons y Joselu– y ya han tenido presencia cuatro dorsales del filial: Javi López (48), Abadallahi (46), Borja Sainz (21) y Sergi (27). El lateral canario ya ha participado en dos partidos, como carrilero y como extremo.