El banquillo le responde a Luis García

En ese instante, con el Alavés sin ideas y plano en ataque, García modificó su equipo con cuatro sustituciones en siete minutos. El mazazo de otra derrota en casa sobrevolaba Mendizorroza con el 0-1 y Stoichkov, Jordán, Luka Romero y Toni Martínez pusieron luz a una tarde gris. «Los cambios han entrado bien y nos han dado el empuje que necesitábamos. Es un grupo unido que no está teniendo ese momento de inspiración. Lo intentan y dan el máximo», confesó Luis García, satisfecho con la actuación de sus cuatro futbolistas de refresco. Exprimió sus sustituciones a pesar de no agotarlas.

Después de cuatro suplencias consecutivas y de gozar sólo de 29 minutos ligueros –ante el Valladolid– en los últimos dos meses, Romero pisó el verde. Y el extremo argentino, aunque le sobró alguna conducción, estuvo participativo partiendo desde la derecha. «Luka ha entrenado muy bien. Le queríamos para ese momento para que jugara por dentro. Por eso pusimos a Carlos Vicente de lateral», explicó García. Y Romero estuvo voluntarioso en la diestra. En la zurda y en la mediapunta, fue Stoichkov quien se reivindicó. El ex del Eibar conectó bien entre líneas. El Alavés mejoró su rendimiento con sus pases filtrados y sus arrancadas. Su buena actuación suma argumentos a su favor para pelear por entrar en un once del que lleva siete jornadas fuera. Y más con las dudas que hay en la banda izquierda.

En la punta, Kike García se ha hecho fuerte en los últimos cuatro partidos. Pero Toni Martínez le apretó ante el Leganés. No 'mojó' pero rozó la diana. Se fabricó sus opciones y complementó bien al '9' conquense. El ex del Oporto siempre tiene minutos pero los aprovechó. También un Jordán que quiere abrirse hueco entre Guevara y Blanco. El catalán dinamizó el medio campo vitoriano. Sus pases y sus envíos largos agilizaron el asedio albiazul. Engrasó con su fútbol la sala de máquinas del Alavés. Jordán fue el último ingrediente con el que cocinaron el empate y soñaron con el triunfo. Les faltó un perejil.