Bajas de los internacionales del Alavés

Antonio Blanco llora desconsolado por perderse la eliminatoria ante el Levante

Sus ojos empezaron a humedecerse a medida que se acercaba al fondo de Cervantes. Sus compañeros se percataron de la situación y dieron un paso hacia atrás para que el mediocentro tuviera una despedida con honores. La ovación del público, consciente de su pérdida, no hizo más que dificultarle aún más el propósito de contener las lágrimas. Los aficionados coreaban su nombre y le hacían reverencias. El jugador cedido por el Real Madrid agradecía con golpes en el pecho. A la altura del corazón.

Ya en el vestuario, Antonio Blanco se derrumbó. Lloró desconsolado. «Es normal. Quería jugar y se está jugando su futuro. Aquí puede volver a jugar en Primera y tiene un entrenador que confía en él», expresó Luis García Plaza en rueda de prensa. «Pido de todo corazón que valoren lo de Antonio. Está llorando a moco tendido porque se tiene que ir con la selección, es lo que tienen estos calendarios.»

El abrazo del técnico, muy crítico con el calendario de la Liga, tampoco le sirvió de alivio. Al menos, después del momento de amargura, salió de Mendizorroza desahogado y orgulloso. Mañana se va con la selección sub-21 que dirige Santi Denia y al igual que en el caso de Salva Sevilla, ha podido jugar su último partido con la camiseta del Deportivo Alavés.