El Alavés recupera margen salarial tras la cesión de Guidetti al Hannover

De su rendimiento y del deseo de su nuevo club dependerá si regresa al Alavés en verano. Guidetti deja Vitoria tras seguir una clara trayectoria descendente. Llegó en el mercado de invierno de 2018 para paliar los problemas del equipo en la delantera. Se convirtió en la pareja perfecta de Munir y los dos impulsaron al equipo a una cómoda permanencia. El club se hizo con él en propiedad ese mismo verano, pero el ariete escandinavo no ha logrado repetir el nivel de sus primeros meses como albiazul. Disputó el Mundial de Rusia con su selección, lo que le impidió completar la misma pretemporada que sus compañeros. Llegó a Vitoria más tarde y fuera de forma, algo que lastró durante todo el curso. Finalizó su único curso completo con solo dos goles.

Su salida, en una tercera temporada en la que apenas ha contado como alternativa en punta, aligera la masa salarial albiazul y le abre más oportunidades en el ajetreado mercado de fichajes. La dirección deportiva vitoriana había vivido hasta ahora limitada por su escaso margen disponible hasta alcanzar el límite salarial. Con la salida del sueco libera un montante que puede aprovechar para apuntalar una posición como el mediocentro, reforzada por Camarasa e Ismael pero todavía coja de un relevo del perfil de Pina.

Su baja, pretendida sin éxito desde el mercado estival, abre, eso sí, un nuevo frente dentro del mercado invernal. La plantilla albiazul se queda, ya sin el sueco, con dos delanteros centros puros. Solo Lucas Pérez y Joselu componen el frente central del ataque albiazul. Ambos han cuajado una primera vuelta notable, aunque se quedan sin un relevo natural que palíe posibles lesiones o sanciones.

Cabe la posibilidad de que alguno de los extremos albiazules pueda jugar por dentro. Oliver Burke ya lo ha hecho en fases de su carrera, en especial con la selección, y también Burgui se desenvuelve en esa zona. Es más, el extremeño ha declarado en alguna ocasión que por dentro es cómo más cómodo se siente, aunque más como enganche que como punta.

La opción de alterar el sistema también tomaría fuerza. En ese sentido, la llegada de Víctor Camarasa apuntala la posibilidad de recurrir a la figura del mediapunta, inédita esta temporada pero siempre presente en los planes anteriores de Asier Garitano. El club ya intentó la llegada en verano de Javier Eraso, que cumplió esas funciones en Leganés con el técnico de Bergara.

Más allá de eso, el club también cuenta con activos que podrían ocupar ese rol. Ermedin Demirovic, que llegó a Vitoria en 2017 y que sólo tiene 21 años, está explotando en su cesión en el St. Gallen suizo, una de las revelaciones de la liga helvética. Con ellos ha anotado ocho goles en doce encuentros. Sin embargo, cortar la cesión podría alterar la progresión de un jugador prometedor. Del Alavés dependerá si reemplaza a Guidetti, aunque su baja le otorga un prometedor margen de maniobra.