El Alavés paga peaje en los viajes

Esta timidez vitoriana fuera no es nueva. El lunes se cumplirán dos años desde el último triunfo a domicilio en Primera del Glorioso, el 23 de octubre de 2021 en Cádiz (0-2 con doblete de Joselu), con Javi Calleja en el banquillo alavesista. Una triste onomástica que el equipo babazorro pretende evitar el domingo en el Estadio de la Cerámica (18.30 horas). Y es que ya ha llovido demasiado desde aquella victoria en el Nuevo Mirandilla: cuatro entrenadores –Calleja, Mendilibar, Velázquez y Luis García–, un descenso, un ascenso...

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Y 19 salidas sin ganar en la máxima categoría. Quince de la temporada 2021-22 y cuatro de la actual. Quince derrotas y cuatro empates –alguno meritorio como el del Camp Nou, con gol de Luis Rioja–. Lo que es lo mismo, 4 puntos de los 57 puestos en juego, un balance condenatorio hace dos cursos (6 puntos en todo el campeonato) que el Alavés de Luis García debe evitar a toda costa. En la temporada 1998-99 el de Mané batió el récord albiazul de partidos seguidos sin ganar fuera en una temporada (17) y para salvarse tuvo que firmar el mejor balance histórico del club en la máxima categoría.

El anterior triunfo fuera es el que sirvió para sellar la permanencia en 2021 en Elche, pero el balance último es demoledor: dos victorias en las últimas 33 salidas. Esa temporada el Alavés sumó 14 puntos como visitante. Mejor que aquellos 6 del curso del descenso; parejo con los 12 del anterior. Pero lejos de los registros de tranquilidad que el conjunto babazorro marcó en su anterior regreso a Primera. 26 con Pellegrino, récord; 19 y 21 con Abelardo.

Ahora las sensaciones y las opiniones coinciden en el que el Alavés ha merecido más. El codazo a Guridi en el área que el árbitro no quiso ver en el tiempo de descuento en Getafe (1-0), el dudoso penalti pitado a Sola en Vallecas (2-0) o el insólito gol en propia puerta de Rafa Marín en Vigo (1-1), donde el cuadro albiazul firmó su mejor partido a domicilio de la temporada. Pero, como dijo Víctor Laguardia en ELCORREO, «esto no va de sensaciones sino de sumar puntos». Y el tiempo empieza a apremiar.

Y el calendario empieza a exigir. Sobre todo lejos de Mendizorroza, donde el Alavés afrontará tres de sus próximos cuatro encuentros. En escenarios, además, complicados. Este domingo visita al Villarreal, el próximo se enfrenta al Atlético en el Metropolitano y, tras jugar la Copa y recibir al Almería, le espera el Barcelona en el Camp Nou antes del siguiente parón liguero. Doce puntos en juego, nueve fuera, para marcar el futuro.