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vitoria. El Alavés permanece alerta al creciente interés que ha despertado Alfonso Pedraza en el mercado europeo. El extremo, cedido por el Villarreal hasta final de temporada, se ha destapado como una de las principales revelaciones del fútbol español y figura ya entre los jugadores ... con más futuro de la Liga. Las grandes actuaciones del atacante cordobés, reconvertido a lateral izquierdo con Luis Zubeldía y Gianni De Biasi, han captado la atención de numerosos conjuntos, que planean tantear al futbolista incluso en el inminente mercado de invierno. El club albiazul, sin embargo, confía en poder retener a Pedraza ante un eventual interés del Villarreal por recuperarlo en enero, ya sea para darle protagonismo a las órdenes de Javier Calleja o para colocarlo en el bazar invernal.
La entidad del paseo de Cervantes es consciente del golpe deportivo y moral que supondría perder al hombre más desequilibrante de la plantilla, que resultó un auténtico descubrimiento por parte de la dirección deportiva y que hoy es uno de los únicos capaces de generar una ocasión por sí solos. Y más cuando las piezas al fin empiezan a encajar en el tablero de Abelardo Fernández, que se ha estrenado con dos triunfos consecutivos en el banquillo del Alavés. Algunas fuentes cercanas al club, sin embargo, mantienen la esperanza de que el cordobés continuará en Vitoria hasta junio.
El acuerdo de préstamo con el Villarreal carece de una cláusula de repesca unilateral que pueda ejecutar a lo largo del próximo mes, por lo que el conjunto castellonense no entraña el gran riesgo para los albiazules. Eso sí, en caso de extrema necesidad por parte del equipo amarillo, el Alavés no cerraría la puerta a una eventual negociación, a cambio de una cuantiosa compensación económica o de una nueva cesión para lo que resta de campaña. La opción que más convence a la secretaría técnica, como resulta obvio, es que Pedraza cumpla con su préstamo íntegro con la entidad de Mendizorroza, algo que además espera conseguir.
La principal amenaza, más allá del deseo del Villarreal, se encuentra en la cláusula de rescisión que blinda al futbolista andaluz, cifrada en 20 millones de euros. Se trata de una cantidad asequible para la mayoría de los equipos que disputan competiciones europeas o que se encuentran en el circuito de las cinco grandes ligas del continente. Ese sería el peor escenario posible para el club del paseo de Cervantes, ya que su margen de maniobra quedaría reducido al mínimo. Pero incluso en ese supuesto, el Alavés podría tratar de mantener en sus filas al extremo zurdo, siempre y cuando alcanzara un nuevo pacto con el comprador o a través del Villarreal.
El futbolista, por su lado, intenta mantener cierta distancia con el revuelo que ha generado su nombre en el mercado. Pedraza no quiso profundizar demasiado sobre el posible interés del Villarreal en recuperarlo, ya sea para darle un lugar en su plantilla a efectos inmediatos (parece poco probable), o para darle salida en el próximo periodo de traspasos. «El Villarreal no ha llamado y estoy centrado en el Alavés. Tengo un año de contrato aquí y no miro lo que pueda pasar a partir de febrero», zanjó Pedraza tras el entrenamiento de ayer, celebrado en Alegría.
El club albiazul, mientras tanto, prepara su particular desembarco en el mercado de invierno, donde entrará con fuerza para regenerar la plantilla a corto plazo. Las prioridades que tienen marcadas las oficinas del paseo de Cervantes son el lateral izquierdo, los extremos y la punta de lanza, donde Abelardo cuenta ahora con Munir como delantero centro fijo. A ellos, sin embargo, se ha unido ahora la necesidad de amarrar a uno de los brillantes activos con los que cuenta en la actualidad.
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