Nada de pijamas. ¿Por qué nos debemos vestir para teletrabajar?

En cuanto al ámbito laboral se refiere, diversos estudios -como 'Peluchette y Karl', publicado en Human Resource Development Quarterly- han demostrado que los participantes en la investigación que teletrabajaban pero se vestían como si fueran a su puesto habitual se sentían con más autoridad y confianza.

Mason Donovan, autor del libro 'La Manzana Dorada', defiende en esta línea que hemos de vestirnos por varias razones. Aquí van cuatro:

- La percepción visual: como te ven, te tratan.

- Una productividad en ascenso: vestirnos para trabajar nos pone en un estado mental diferente. «Nos sentimos más presentes y tenemos mayor nivel de compromiso y dedicación», dice.

- Una mayor concentración: «La ropa puede servir de recordatorio, poniéndola en modo de oficina mentalmente», advierte. Y va un paso más allá en sus efectos: «Si usa ropa de vestir es mucho menos probable que haga las tareas hogareñas. La ropa puede alejarla de tangentes que buscan distraerla».

- Nos ayuda a delimitar el horario laboral y de ocio porque, habitualmente, no utilizamos la misma ropa para trabajar que en nuestro tiempo libre, así que el hecho de cambiarnos de atuendo cuando terminamos de teletrabajar permite delimitar la rutina.

Sé que ahora mismo estás pensando que una de las grandes ventajas de teletrabajar es poder hacerlo en pijama. No digo que de vez en cuando no puedas permitírtelo pero sí que, por todos los motivos que te he comentado, te aconsejo que esta vestimenta no se convierta en tu hábito.

A continuación te propongo diversas opciones para vestirnos para el teletrabajo sin tener, eso sí, que renunciar a la comodidad:

Esta opción puede llegar a ser mucho más cómoda incluso que el pijama. Elige el estilo que más se adapte a ti y añádele una chaqueta de punto en caso de que necesites abrigarte. ¿Lo bueno? En casa no hace falta medias.

Otra opción muy cómoda es una falda y una camiseta básica. Esta temporada se nos presentan muchas opciones: mini, midi o larga. Además, las plisadas vienen pegando fuerte. Tú eliges.

¿Qué me dices del mono? Una forma de vestirse de forma rápida y cómoda sin renunciar a estar muy favorecida.

El pantalón jogger es una de las prendas más cómodas que existen. En función de con qué lo combines puedes transformarlo en un estupendo look de trabajo.

El chaleco se va a convertir en un 'must' o prenda imprescindible en nuestros armarios de otoño. Por tanto, puede ser una gran opción para obtener un look profesional además de abrigado y súper favorecedor.

Espero que todas estas opciones te den muchas ideas para que tu imagen te ayude a conseguir tus objetivos y ¡a comerte el mundo! Recuerda que… si nos vemos bien, nos sentimos mejor.

¡Sed felices!